Capítulo 5

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–Escucha – le digo a Bryn cuando nos sentamos a la mesa a cenar – No me pagaron esta vez, así que pasaremos una semana muy difícil. Tendremos que hacer todo lo necesario para hacer que la comida alcance. Se que tal vez sea difícil, pero...
–Descuida.– me interrumpe – Lo entiendo. Tal vez pueda vender algunos de mis juguetes viejos.
Ella siempre está dispuesta a salir adelante.
–Buscaré la forma de conseguir dinero. No te preocupes –le dijo.

Está noche, solo cenamos un poco pastel y también algo de comida enlatada.

Es muy poco, pero hay veces en la que no hay nada que comer.
Por lo menos hoy tenemos algo que llevarnos a la boca.

Como no tenemos otra cosa que hacer, decidimos irnos ya a dormir.

Lo que más detesto al final del día es dormir. Todas las noches me asaltan esas horribles pesadillas. Siempre son diferentes, pero siempre tratan de los mismo.
Siempre me están persiguiendo esas espantosas criaturas que solían ser personas.
Sus cuerpos destrozados, y sus caras irreconocibles.

Al final, el cansancio siempre me vence, y termino cayendo en las tentaciones del sueño...

Al parecer esta vez es un buen sueño.
Estoy en un hermoso prado, el cielo esta completamente despejado, y la fragancia de las flores inunda mi nariz.

Visualizo la cabellera rubia de mi hermana Bryn.

Estoy persiguiéndola, y esta vez me siento completamente feliz.

Bryn no deja de correr, y a medida que avanzamos, el paisaje va cambiando.

De repente , ya no estamos en el bello prado, sino que ahora todo a nuestro alrededor se ha incendiado.

Bryn se detiene. Me acerco a ella, y cuando la giro para verla, me encuentro con una niña cuyos ojos no se encuentran, y me sostiene que sus frágiles y esqueléticas manos.

Me despierto sobresaltada.
Aunque ya me he acostumbrado a las pesadillas diarias, no dejo de sobresaltarme al final.

No recuedo la última vez que tuve un buen sueño.

Recuedo que mamá siempre nos despertaba a causa de sus gritos en las noches, después de una pesadilla.

No sé si vuelva a dormir bien alguna vez.

Bryn no se ha despertado.
Tal vez, esta vez no la he despertado, o esta demasiado cansada como para despertar. Decido no despertarla.

Me doy una ducha rápida, porque el agua que tenemos disponible es muy limitada.
Me pongo los jeans que traía ayer y mi suéter blanco.

Mi tuno en la farmacia comienza a medio día.
Ayer no obtuve mi paga, y espero que hoy me den algo.

Ya son cerca de las diez de la mañana y Bryn no se ha despertado. Estoy comenzado a preocuparme.
Decido ir a verla.

A simple vista parece que duerme, pero a medida que me acerco, hay algo que no va bien.

Tiene la piel grisácea y los ojos abiertos completamente. No parpadea, solo los mantiene abiertos, y de su boca sale una especie de baba blanca.

Temo que esté muerta.

Prometo Cuidarte|| [SinEditar] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora