Narra Samuel.
La clase de hoy ah sido bastante dura, y aun mas con las interrupciones de dos de mis alumnos. La verdad es que no tenía mucha paciencia hoy y de hecho estoy muy irritante. Me molestó demasiado que me hayan interrumpido y, para colmo, cuando llegué a casa Guillermo estaba con uno de sus amigos a los gritos en su habitación. Varias veces grité cosas como "cállense" "tengo trabajo que hacer" o "no griten mas". Realmente estaba molesto y no entendía por qué. Escuché gran parte de su conversación a través de la delgada pared pero no todo ya que bajaban la voz de vez en cuando. Quería saber de qué estaban hablando y la rabia de no saber me estaba provocando un dolor de cabeza terrible.
Los gritos de Guillermo era evidente que eran para mi, para mosquearme mas de lo que ya estaba, y lo estaba logrando. Salí de mi habitación cerrándola detrás de mi con un fuerte portazo, caminé unos cuantos pasos hacia la habitación de Guillermo quien todavía tenía su puerta abierta e irrumpí en ella.
-Rubén ¿no deberías irte ya? Dejé mucha tarea y tienes que hacerla para mañana.- dije cabreado y con un dolor de cabeza horrible.
-Te dije que no entraras a mi cuarto, Samuel.- me desafió Guillermo.- ¿O acaso te olvidas de mis condiciones?
-No hables de tus condiciones después de hacerme tal cosa, Guillermo.- Dije agarrándome la cabeza para luego darme cuanta de lo que dije. Sentí mi cara arder por la vergüenza que tuve en ese momento. ¿Cómo eh podido mencionar eso sin una gota de pudor en mis palabras?
-Mejor me voy, Guillermo.- dijo Rubén en el intento de levantarse pero Guillermo lo detuvo.
-Tu no te vas.- le dijo a aquel joven.- El que se va es Samuel. Sal de mi habitación.- agregó dirigiéndose a mi.
-¡NO LO VOY A REPETIR, GUILLERMO! ¡ESTÁS BAJO MI RESPONSABILIDAD Y QUIERAS O NO ME TIENES QUE OBEDECER! ¡AHORA DILE A TU AMIGO QUE SE DESPIDA!- le grité con furia. Sentía que me iba a explotar la yugular en cualquier momento pero no iba a dejar que me tratase como a un cualquiera. Además, era la primera vez que reaccionaba ante las acciones de él y me sentía muy orgulloso.
-Vale.- dijo muy sorprendido Guillermo y con los ojos algo aguados.- Nos vemos mañana en la entrada.- decía despidiéndose de Rubén.
-Vale. Me llamas por cualquier cosa.- Y le dio una palmada a Guillermo en el hombro para luego acercarse a la puerta y pasarme por al lado diciéndome en susurro para que su amigo no escuchara.- No lo trates así, él te quiere... Por cierto, tapa los chupetones de tu cuello. No quedan bien en un profesor.- Y se fue.
"¿Qué? ¿Guillermo queriendo a alguien? ¿A mi?"
"Olvidé completamente éstas malditas marcas, joder".
-Vete a bañar, Guillermo.- le dije mas calmado y mirando el suelo.- Luego haces tu tarea, antes de cenar.
No dijo nada, sólo se limitó a tomar una toalla de su armario y se fue hacia el baño dejándome solo en su habitación. ¿De verdad me ah obedecido?
Luego de unos segundos escuché como se abría el grifo de la ducha y yo aun estaba en su habitación, dejándome llevar por mis emociones. Miré a mi alrededor: su cama deshecha, su ropa revuelta sobre una silla, la consola prendida... su móvil en la mesita de noche...
"No, Samuel. No te metas en éstas cosas".
"¿Hablará con alguien sobre mi y de lo que... sucedió?"
Me acerqué a la mesita de noche y me quedé mirando su móvil que estaba encima de un cómic. Sin más lo cogí y, claro, tiene pin. Lo volví a dejar en las mismas condiciones y comencé a recorrer su habitación. Revolví entre su ropa, miré dentro de los cajones y del armario, miré que videojuegos tiene y, finalmente, me senté en su cama. Observé que, entre las sábanas, había una camiseta de Guillermo. La cogí con ambas manos e instintivamente la acerqué a mi rostro para olerla. El olor a Guillermo estaba en toda la prenda y aspiré profundamente su aroma mas de una vez haciendo que se me erizara la piel. Para cuando me di cuenta, el agua de la ducha ya no se escuchaba y yo seguía en la habitación de Guillermo con su camiseta entre mis manos. Me levanté apresuradamente de la cama, dando la espalda a la puerta y comencé a esconder la camiseta de Guillermo debajo de mi camisa, sujetándola con mi cinturón.
-¿Qué haces todavía aquí?- me preguntó Guillermo al entrar en su cuarto.- Se supone que tienes que preparar la cena.- Yo aun no me daba la vuelta tratando de esconder su camiseta entre mi ropa, pero cuando lo hice me quedé impactado.
-¿Qué haces así?.- Estoy seguro que me sonrojé, sentía arder mis mejillas.- Ponte ropa.- dije examinando su cuerpo.
-Es mi habitación. Puedo estar así.- hizo una pausa aun estando en la puerta de su cuarto.- ¿Qué cocinarás?
-Pediré unas pizzas.- dije con la vista gacha.
-Vale. ¿Ya te vas para poder vestirme o te quedarás para seguir molestando?
-Me voy. Lo siento.- dije y salí de su habitación pasando por su lado. Me dirigí a mi habitación y me encerré allí.
"¿Por qué tomé su camiseta?"
"¿Por qué me sonrojé al ver su torso desnudo, tapando su hombría con sólo una toalla alrededor de su cintura?"
"¿Por qué me siento tan avergonzado?"
Saqué de dentro de mi ropa su camiseta y me recosté en la cama con la prenda de Guillermo entre mis manos y, nuevamente, estaba repasando su cuerpo en mi mente. Sus delgados brazos con pequeños músculos, su abdomen plano y la piel de su cuello se ve tan delicada y suave al igual que el resto en su cuerpo. Una piel tan blanquecina y, seguramente, suave al tacto.
"¡Joder, Samuel. Tienes novia!"
-Samuel.- Guillermo estaba del otro lado de la puerta, llamándome. Mis ojos se abrieron enormemente al recordar que aun tenía a la vista su camiseta.- ¿Estas ahí?.- Levanté levemente la cabeza y la escondí debajo de la almohada y lo dejé pasar aun con mi respiración agitada.
-S-si, si. Pasa.
"¿Se habrá dado cuenta que le falta la camiseta?"
Guillermo entró a mi habitación ya vestido y me miró mientras me sentaba en la cama.
-¿Ya vas a pedir esas pizzas?.- me dijo algo tímido.
-Si, en un minuto.
-Vale...- Hizo una pausa y luego continuó.- También te vengo a recordar mis condiciones. Entraste en mi cuarto sin permiso.- Su cara cambió completamente a una mas provocativa y continuó hablando dejándome sin palabras ante su reacción.- Te estas portando muy mal, Samuel.- dijo acercándose a mi, peligrosamente.- No querrás que te enseñe buenos modales ¿verdad?
"¿Qué es lo que haces, Guillermo?"
-¿Q-qué haces?- Joder. Me ah puesto nervioso.
-Enseñarte a respetar mi espacio y mi privacidad. ¿Crees que no me eh dado cuenta que has estado revisando mi habitación?
-Y-yo... y-yo...
-Tu te quedarás muy quieto y calladito mientras te lo explico.
Guillermo empujó de mi pecho haciéndome caer de espaldas a mi cama y se arrodilló en el suelo frente a mi.
-No lo hagas.- le supliqué.
-Oh, si, Samuel. Si lo haré.- dijo para soltar una sonrisa ladeada muy provocadora.
"¡Joder, Guillermo! Otra vez no..."
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OMG! ¿Qué es lo que pasa entre éstos dos? Por dioh! n.n
Como siempre, gracias a los que siguen a diario esta historia, especialmente a CandyAngelNnhaLove y perdón por lo tarde que actualicé hoy, pero la inspiración no llegaba a mi y la tele me distrajo mucho XD
Muchos X & O
Debuh z4
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Mucho mas que un amor prohibido (WIGETTA LEMMON) [Completa]
FanfictionCada uno escribe su propio destino.