Al llegar a mi casa pude ver en la ventana a mi madre, estaba como siempre, cocinando, la miré por fuera de las rejas de la cochera, la tela que protegía la ventana se transparentaba así que sí, me veía muy bien, ella sin querer alzó su mirada, yo sólo quería abrazarla, al verme, puso sus manos en su boca y empezó a llorar salió corriendo por la casa para abrirme la puerta.
-¡Hija mía!
-Madre...Mi voz ahogada en el nudo de mi garganta, sólo me dejé llevar y me solté completamente en los brazos de ella, comencé a llorar y ella igual, sentía lo que un hijo siente al abrazar a sus padres, protección, cariño y amor puro, amor sin ningún costo, sin pedir nada a cambio.
-Mírate, ay Dios mío...
Claramente había bajado unos kilos, de tanto sexo y ejercicio que Villareal me obligaba a hacer.
Mis hermanas salieron y también empezaron a llorar, las abracé, las abracé a todas y al fin, me sentí como antes. Estaba en casa.
Les inventé una mentira para no preocuparlas, algo simple, pero no tan desastroso, al fin la normalidad llegó semanas después, seguí yendo a la universidad, entregué mi tesis y ya tenía mi papel de profesionista, al fin, ya era una mujer libre, salía con mis amigos y llevaba una vida tranquila, conocí a un chico, en la graduación, técnicamente no éramos nada pero en las noches si éramos más que amigos, más su pene y mi vagina.
Al tiempo eso terminó, ya era Noviembre cuando una llamada, volvió a cambiar todo en mi mundo perfecto.-Bueno...
-Al parecer se te olvidó Venecia, Monica, nosotros no te hemos olvidado, te mandaré un msj al lugar donde llegarás a Venecia, si no cumples, Villareal te perseguirá otra vez.
-¿Serp?...Colgó la llamada y a los minutos ya tenía el mensaje en mi celular. Villareal... Esa maldita, aunque ya había pasado tiempo aún, por pequeños momentos la seguía teniendo en mi cabeza, le pensaba, y eso me mataba. Fui al aeropuerto a comprar un vuelo a Madrid y de ahí a Venecia.
-Madre, tengo que salir fuera, un tiempo... Veré un bufete de abogados que me han estado apoyando en conseguir trabajo fuera del país, estaré en Madrid, me llamas, te amo.
Ella no tuvo problema alguno, aunque ya no viviera en su casa seguía siendo mi madre. No tenía opción, no quería a Villareal detrás de mi, otra vez.
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Red Room; La Máscara de Rubí (BORRADOR)
Romansa¿Será el placer de la sodomía que la llevó a querer más? O fue la mente de Villareal que la engañó para hacerle sentir que necesitaba más... Nada en concreto, nada serio, nada es para siempre. Mónica estudia Psicología, una noche es secuestrada y a...