Si amarte no estuviera prohibido.

¿Y cupido?

|Lunes 21 de Marzo

Querido diario:

Ha sido un día tranquilo, como de costumbre, nada nuevo.
Ayer fue un día normal.
Y mañana sera otro día normal.

Todo tan monótono.

Buenas noches Diario.

Me desperté una mañana cualquiera, mi pelo estaba desecho y otra vez había tenido un sueño extraño. Esta vez, yo era un pez y mi madre tenia cabeza de perro y me cuidaba, era extraño.
Cogí mis cosas, hoy tenia que exponer el trabajo de Filosofía, tenia todo preparado para conseguir el diez, así mis notas serian buenas, excepto en Matemáticas.

He decidido dejarme caer.

Llego a clase y como siempre, la primera en entrar. Me siento en primera fila justo al lado de una chica que se llama Julia. Procuro no hablar mucho con ella.
No es que no me caiga bien simplemente ella esta ahí.
Las clases fluyen normales y aburridas solamente matemáticas me parecía un infierno, no entiendo el álgebra, no me interesa, mi profesor ha dejado de pedir que me integre más en las clases. El también ha caído.

En la hora de Filosofía me pedí voluntaria para hacer mi exposición primero y como siempre, perfecta. Demasiado perfecta. Para mi gusto.
Me volví a sentar y mientras lo hacia no paraba fe oír las risas de los que se sientan detrás mía, David y sus dos gorilas. Gil y Marco.
No se de que se ríen, ellos no han hecho el trabajo y les toca quedarse castigado. Ahora debería reírme yo, pero no, no me voy a rebajar a su nivel.

Marta es la chica más guapa de la clase y ya tiene novio. Jorge, como desearía que Cupido me lanzara una flecha a mi también, así mi vida, seria realmente una vida.

¿Existe un Cupido para mi?