La fiesta había terminado y ella y yo estábamos en un taxi de camino a el edificio en dónde vivíamos, sólo que en diferentes pisos.Nos sentamos en el asiento trasero y ella solo se digno a ver el paisaje tras su ventana, sinceramente me digne a admirarla.
Los focos de la ruta pasaban y iluminaban su cara por momentos, ella vestía de negro, eso hacia que su piel y sus ojos resaltarán más que nunca. Su pelo negro brillaba tras el brillo de la Luna. Ella solo se detuvo a mirar en un solo lugar quedándose inmóvil, ¿En que estará pensando? ¿Pensará en todo lo que paso en esta noche? ¿Recordó lo que le dije?.
Ella estaba sumamente cansada y parpadeaba con lentitud. Me gustaría que se recostase en mi hombro. Y desde ese momento supe que estaba jodidamente enamorado de ella-Punto de vista de un chico.