Amor Fugado

El cumpleaños de lina.

Hoy me levante con ánimo por que sabía que mis padres me harían una fiesta sorpresa por mis 18 años, sí, el tiempo va muy deprisa y nadie lo detiene, así fue sonó la alarma a las 6:00am, me lavé los dientes y bajé a desayunar y ahí estaban, como siempre mi mamá tomando café, su esposo comiendo maní y mi hermana de tres años con el muñeco que le habían regalado, por supuesto había un asiento vacío, era el mío, me senté y compartí ese momento con mi familia, mi mamá me preguntó si tenía planeado salir con mis amigos y amigas pero le dije que no, obviamente se lo dije porque ya sabía lo de la fiesta sorpresa, en esta vida todo se sabe y más aún cuando tienes pajaritos cerca del cuarto, así es, mi hermana me contó todo y bueno a quién le tocó fingir que no sabía nada fue a mí. Llegaron las 5pm y decidí salir al centro de la ciudad en busca de unos zapatos que había visto en promoción, llegue a la tienda y oh por DIOS estaba ahí no lo podía creer era mi mejor amiga de la infancia, la mire de reojo todavía no lo podía creer y saben tampoco podía creer que estuviera cogiendo los mismos zapatos que yo quería y fue en ese momento que decidí acercarme y saludarla...
-loren! Hola...ha pasado mucho tiempo...como estas?- le da un abrazo.
-lina! Que gusto verte...pues me va bien...sabes ya tengo un hijo- le coge las manos.
-wow y cuantos años tiene?...estas viviendo con el padre de tu hijo?- se sienta en el mueble del local.
- tiene 1 año, la verdad es que no vivo con el, se fue a París, lo nuestro no tenia futuro, admito que ha sido responsable con su hijo y bueno mejor esta platica para otra ocasión... y bueno que vas a comprar?- se ríe.
-bueno me compraré justo estos zapatos- se ríe.
En eso sale la chica de personal y nos dijo que solo quedaban ese par de zapatos, mi amiga y yo nos miramos fijamente y rápidamente cada una cogio un zapato, fue algo tan raro y agresivo a la vez pero decidí que mi pie era muy delicado para comprar en rebajas así que le dije a mi amiga...
-loren! Toma el zapato, ojalá nos veamos nuevamente- le entrega el zapato, se despide y sale de la tienda.
Enserio tenia tantas ganas de comprar unos zapatos pero ya se me hacia tarde para llegar a la casa...tome un taxi y allí estaba justo en la puerta, no sabia si tocar o no, mi corazón se aceleraba y toque la puerta, cuando me abrieron fue realmente asombroso, toda la familia, mis amigos y amigas del colegio, gritando ¡Sorpresa!...
Yo me sentía tan feliz, la torta era de chocolate con chispas de chocolate bañada en chocolate, lo mejor del mundo, me cantaron el feliz cumpleaños, recibí mis regalos y de repente uno de mis amigos me invita un rato al portón de mi casa...
-si, dime que pasa carlos?- sorprendida.
- lina tu sabes, este yo...siempre te he admirado, eres...- nervioso.
- soy que?- ansiosa.
- eres una buena hija y buena amiga y...- nervioso.
- ah si Buena hija y amiga, gracias tu también eres un buen amigo sabes, ya voy a entrar si...- decepción total, se entra.
- por que siempre me pasa lo mismo...cuando estoy cerca de lina no puedo decir lo que de verdad siento- se coge la cabeza y entra a la casa.
Por alguna extraña razón llegue a pensar que Carlos me pediría algo especial pero no lo hizo, siempre me deja imaginar muchas cosas desde que lo conozco, bueno después de la fiesta y de que la familia y amigos se retirarán de mi casa, mi mama me entregó un sobre mientras su cara se llenaba de felicidad y tristeza a la vez, abrí el sobre y oh sorpresa, era mi boleto a París no lo podía creer, con todo pagado la fecha de mi viaje era para el sábado que emocionante, la abracé mucho a mi mama.