Una historia complicada. -Harry Styles-

Cap.12

Han pasado ya 4 dias desde que salimos de la escuela.

Johanna estaba demasiado preocupada al momento en el que salimos. De hecho, estuvo a punto de ir a levantar una demanda a la escuela por no reiterarnos la inseguridad de ir ese dia a clases. Louis trato de clamarla diciendole que toda la culpa habia sido nuestra.

Las novedades:
Niall esta empezando a hablar con Lena, ¿quién lo diría?. Por lo que él me ha comentado ella aún es muy tímida con él , pero el que hablen ya es un gran avance. Niall la llama todas las noches desde lo ocurrido a la escuela.

Estaba en el piso de la sala con mi celular en la mano oyendo música, esperando a Harry.

Hoy volveríamos a intentar conseguir su licencia, tengo una idea de lo que podriamos hacer si esta vez no lo consiguieramos...

Finalmente oi como abrían la cerradura de la casa.

-Ya llegué- anunció parado justo en medio del pasillo. Traia una camiseta gris, unos pantalones negros y sus botas café vino.

Me levante y tome la bolsa que tenia sobre el sillón. Fui a la mesa de la cocina y deje una nota en el refriguerador:

"Sali con Harry, no me esperen hasta tarde.

-Alex."

-¿Ya nos vamos?- preguntó. Asentí y pase a un lado de él. -también me alegro de verte amiga.- murmuró cerrando la puerta con llave. Voltee los ojos. Ultimada mente Harry se pone de muy mal genio cuando no lo saludo o no le hablo muy frecuentemente.

Lo tome por el brazo y le di un medio abrazo.

-Lo lamento. Hola Harry.- sonrío y despeino mi cabello.

Louis había dejado el carro en la calle para que pudiera enseñarle a Harry como arrancar y partir derecho, que según él, era de lo más fácil. A mi Steve no me dejo agarrar el carro hasta después de que hiciera tres exámenes escritos y un curso de seguridad vial.

Desde que encendi el carro fui enseñandole a Harry todo lo que hacia, cuando hacia el alto y cuando debia de ceder el paso. Él sólo asentía.
Les seré sincera, no le veia a Harry muchas ansias de aprender a manejar. Quizas el queria tener ya su licencia, pero pareciese como si se fastidiará de que le dijera que hacer.

Llegamos al estacionamiento del centro comercial y aparque en un lugar donde solo habían tres carros, aunque claro, algo alejados de nosotros, no queríamos que Harry tuviera un intento fallido, una vez más.

- Ok, ven acá.- salí del asiento del conductor para cambiar de posición con él, quedando ahora yo de copiloto.- muy bien- tomé una pequeña libreta que estaba en la guantera- ahora, las manos en el volante, ¿cómo deben de estar?- pregunté sacando mi pluma dispuesta a anotar.

-¿tienes que hacer eso?- elevó una ceja hacia mi.

-Las manos...-

-Entre las diez y diez y las tres menos cuarto.- respondió de mala manera.

-Ok, ahora, enciende el coche- giro la llaves y dejo oir el sonido del motor- inicia- él comenzó a meter los cambios. Fue derecho por un momento, se sentía como un paseo demasiado tranquilo, lo estaba consiguiendo. - vas muy bien Harry , ¿Puedes salir del estacionamiento?-

-Por supuesto que puedo.- dijo pavoneándose. La salida quedaba directa hacia nuestra dirección asi que solo siguio recto.

-Bien, ahora, ten cuidado, este es un cruce y tienes que esperar tu turno para pasar.- los carros iban y venían y parecia qué ninguno respetaba el turno que debía, Harry apretó un poco sus manos al volante. Ninguno le cedía el paso. De pronto, los carros de atrás comenzaron a tocar el claxon. En un momento de descuido, Harry tomo cuenta propia, y piso el acerelador.