CAPÍTULO 1

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Una partícula es la parte muy pequeña de una cosa, la unidad mínima de la materia es el átomo, dentro del átomo están las partículas. Hay varias teorías, libros y artículos publicados sobre el asunto y una de tantas teorías es sobre la existencia de 11 partículas encontradas, y de la existencia de una décima segunda partícula invisible. Esta partícula invisible según científicos podría contener la clave, el secreto de la existencia. La llaman "la partícula de Dios" La ciencia ha invertido miles de dólares en pesquisas para detectar y poder comprobar la existencia de la dicha partícula. La fe, es la partícula primordial, es a través de esta y también la palabra de Dios que todo paso a existir, la luz, los astros el mar y todo lo existente. Jesús dijo: "...Si tuvieres fe del tamaño de un grano de mostaza..." Un grano de mostaza es diminuto, pequeño, sin embargo al crecer se torna una de las mayores hortalizas. Así describió el Señor a respeto del tamaño de la fe. La extraordinaria y magnifica mecánica del funcionamiento de celebro ha impresionado los pesquisidores. La neurociencia precisamente dicho, estudia la actividad cerebral, y es asombroso la manera en que nuestro celebro funciona. Ningún ser existente en la faz de la tierra tiene la capacidad racional que tenemos. Al pasar de los años se ha podido entender aunque no mucho las funciones cerebrales. La memoria humana y su increíble capacidad de almacenamiento. La funcionalidad del celebro es un enigma hasta para la neurología. La forma en que la ondas celebras funcionan y los pulsos eléctricos ocurridos en el asombran. La energía sináptica y otras tantas cosas reveladas a través de estudios muestran la perfección de celebro. La fe nos es un sentimiento, es una certeza, una convicción absoluta. La fe debe ser usada con inteligencia, racionalidad, muchos confunden un sentimiento con la fe. Desde la mente, del intelecto viene la certeza, la convicción, eso no viene del corazón. El propio texto bíblico dice: "Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve..." Hebreos 11.1. La fe debe ser usada de forma inteligente, con el uso de la razón sin embargo aunque en determinadas situaciones tengamos que creer en lo imposible fundamentado en nuestra fe en la palabra de Dios. Creer en las promesas santas y confiar es tener fe hasta porque la fe viene por el oír la palabra de Dios. Cuanto más se conoce a Dios, más fe tendrás en El, pero esta fe no viene por informaciones o título académico y si por una experiencia con Dios. Muchos son sinceros en decir que no creen en Dios, es comprensible porque sabemos que todavía no tuvieron una experiencia con El. Más adelante hablaremos sobre esta experiencia.

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