19
Para que triunfe el mal, sólo es necesario que los buenos no hagan nada.
-Edmund Burke
Narra Luke
Esa pregunta era muy directa y no merecía la pena contar la historia porque sabía que ella le dolería, y sería muy egoísta de mi parte decir que yo nunca moriría y para mí una desgracia porque tenía que ver a toda la gente que amo morir frente a mis ojos.
Claro que me había enamorado de alguien como yo, alguien que por razones equivocadas había tomado la decisión en donde ya no me vería jamás.
Un ángel, un ángel que decido nunca revelarse, alguien como yo, un ángel caído que nunca podría regresar al cielo o estar a su lado.
Ella me había traicionado, había jurado tomar la decisión donde me incluía a mí y a lo nuestro, pero cuando me enteré que ella nunca se había revelado, me sentí traicionado y jure nunca volver a tener nada que ver con ella, nada que incluyera un futuro con ella y eso estoy haciendo.
Desde que conocí a Kate ya no había pensado en ella, en el ángel y no pensaba seguir torturándome, así que opté por no mencionarla.
-No- dije un rotundo no, tan seco que hasta yo me sorprendí- mi turno.
Después de una ronda de preguntas, que, por cierto, llegaba a su fin. Y después de que habíamos comido.
Yo hice la última pregunta.
-Y si te dijera que...- me puse serio - si fuera posible convertirse en alguien como yo... ¿aceptarías serlo? -
Ella pareció paralizarse.
-Eso... ¿es posible? -
-Que paso con eso de la regla número uno- me acerque y la bese- no contestar la pregunta con otra. -
Me encantaba estar cerca de ella, después de tanto tiempo alejándome de las personas ya era tiempo de hacer algo por mí. Algo que me hiciera sentir bien.
Narrador
(Puesto que es la parte de Zedd y no quiero escribir aun sus pensamientos, hablará el narrador... ahora sí, proseguimos)
Él chico se encontraba aun en la pelea, ya a unos pasos de que ésta acabara.
A lado de él se encontraban unos inmensos hombres, chocando contra el delgado cuerpo del chico. Zedd por supuesto ya estaba cansado de esos mastodontes, pero le encantaba ver peleas.
Siempre había sido de esos ángeles que hacían su deber y que luchaba por lo justo, pero eso cambio en el momento en que lo condenaron, ese momento fue crucial para lo que ahora era.
Lo habían castigado, era injusto para él, después de todo lo que había hecho por dios, ¿así se lo pagaba?, Así que decido cambiar su nombre, ya que el significado ya no valía para él.
Su nombre era Zedekiah que significaba "dios es justo". Su madre se lo habia puesto, ella le juro que si dios era justo, él tambien tendria que serlo.
Desde ese momento algo en él se rompió, y comenzó a hacer lo que nunca se imaginó, las peleas, los robos corrompieron a Zedd de la peor manera. Ahí fue cuando conoció a Bastián, eran tal para cual.
En esa etapa de su vida, ya conocía a Luke y él había hecho que se alejará de ese ambiente, cuanto le agradecía por eso.
Después de un rato él chico se percató de que sus amigos ya se habían ido hace horas, figurado, pues apenas llevaba 30 minutos la pelea.
Ésta estaba reñida, el demonio produjo un horrendo grito cuando el ángel creaba un ácido entre sus manos y este era lanzado a su cuerpo desnudo, mientras que el demonio desaparecía ante sus ojos, se instalaba a su espalda y profanaba unas palabras en otro idioma, de él ángel emanaba sangre de su espalda y aparecían unos arañazos si haberlo tocado.
Antes de poder gritar otra cosa alguien tomo de los hombros al chico y sin darse cuenta éste ya gritaba palabrotas hacia la chica que había ido por él.
- ¿Isabel? - pregunto él chico sorprendido- ¿Qué haces aquí? tu no deberías... tu no deberías estar aquí, no puedes ni bajar- sonrió la chica-
- ¡Ay! Zedd no sabes lo que dices...nada de lo que te dijeron es verdad, esos estúpidos amigos que tienes-
- ¿entonces qué haces aquí? - pregunto- nadie te mando a vigilar la tierra-
-Buscando lo que es mío- arrugo la frente- sé que está aquí y no, nadie me mando aquí, simplemente doy un paseo-
-Sabes que si alguien sabe de esto te pueden expulsar del cielo y no, no dejarte aquí, sino llevarte al infierno-
-Mi vida, no hay nada peor que la tierra- sonrió- y nadie le va a decir nada a nadie, saben...-se detuvo- sabes que los haré pagar si lo hicieran, ahora. - Isabel miro a todas partes- donde está mi querido Luke-
Isabel era el pasado que Luke quería olvidar.
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El Chico Raro I - LUKEZEL
Lãng mạnLUKEZEL DÚOLOGIA DE EL CHICO RARO LIBRO I ¿Alguna vez te has detenido a pensar en que pasaría si todas las historias que te contaban de pequeño simplemente fueran reales? los hombres lobos, los vampiros, los ángeles. O ¿Por qué algunas cosas no ten...