Lo peor de las vacaciones son las despedidas.
-Volveré en verano, mamá. -Prometí para consolarla.
Había pasado un año desde que volví al pueblo con mi madre, después de que Zayn se fuera con aquel chico, fui el hazme reír de la ciudad gracias a Harry, que se dedicó a contar mis mierdas a todos. Aunque sea sorprendente, Louis fue el único que me apoyó.
Él también lo pasaba mal, Harry también fue diciendo unas cuántas gilipolleces del pobre Louis...
En resumen, me vine al pueblo de mi madre donde iba a estar aislado de las redes sociales y de la mayoría de cotilleos de estrellitas como Naughty Boy y su asqueroso novio.
¿La parte buena?
Bueno, no hay parte buena.
Desde que vine al pueblo mi madre me paga un psicólogo privado que viene a casa a tratarme.
He estado todo este tiempo con mis padres y Louis, cuidando a un par de caballos y haciendo cualquier cosa para sacar algún euro de donde sea.
Ah, Louis, claro.
Decidí que dejar a Louis sólo no sería algo bueno, así que simplemente le pedí que me acompañara.
No había visitado la ciudad desde entonces, pero según mi psicólogo ya estaba preparado para hacerlo.
Iría a vivir a la ciudad hasta verano, como un experimento, y por supuesto, Louis se venía conmigo.
