Mis amigos

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Trazaba líneas con lápiz de tinta azul por todo el margen de la hoja de papel. Nunca me llamo la atención los dibujos ni las pinturas, pero a mi amigo Tawen si. El es un medio año mayor que yo y por coincidencia alguna todos mis amigos y yo tenemos 16 años, ni mas ni menos.

Estamos en invierno, hace mucho frio afuera y esta nevando un poco, los días están nublados y todos grises. Este tipo de días no son mucho de mi agrado, me hace sentirme imbécil y me pone algo triste.

Aun me acuerdo... de cuando recién llegue a este lugar, era un completo tonto ¡ja! en ese día conocí a una niña muy simpática, era de pelo negro y ojos de mismo color, parecía una persona a la cual no le podías hablar, pero en realidad nunca callaba, era como una radio.

- oye Say, en que te distraes tanto amigo, nos llaman para cenar -hablo mi amigo Tawen trayéndome de nuevo a esta fría realidad.

-solo pensaba un poco de cuando llegue aquí, si que éramos tontos en esos tiempos. -Me empecé a reír junto a Taw, eran bonitos recuerdos.

-¿te acuerdas cuando metíamos las cabezas en las tasas del baño, a ver quien aguantaba mas tiempo con la cara llena de orina? -estallamos de risa, si digo que éramos tontos, era por que éramos unos tontos de verdad.

- y teníamos que hacerlo con cuidado por que era en el baño de mujeres -y otra carcajada mas, estábamos que llorábamos de risa.

Sin darnos cuenta, un rubio de ojos azules entro en la habitación en la que nos encontrábamos. Rubio, de ojos azules, piel blanca y linda sonrisa.

-¡ahhhhhh! -grito Taw haciendo que tuviera que taparme los oídos con mis manos- ¿¡de donde saliste maricon!? -grito aterrado Taw dando un salto hacia atrás.

-primero, salí de una vagina -ah, este nunca cambia. reí para mis adentros- y segundo, ¡no soy marica!

- no, es que así no se puede -dije yo- estas jugando con mis sentimientos ¿no? ¿ya te olvidaste de aquella noche? en la que te hice mío, en la que gemías y pedias mas -fingi llorar Taw estaba muerto de la risa y el rubio tomaba un sonrojo- ¿sabes? se acabo, Taw desde ahora somos pareja oficialmente, no mas mentiras. -lo abrace por la cintura.

Taw y yo nos dio ataque de risa, es que en realidad este tipo de bromas lo hacíamos a menudo. Y aun que parezca vergonzoso o raro, ya todos están acostumbrados y la pasamos bien.

-¡pero si se ha quedado rojo Yure! -rio Taw- pero que mono

-están locos, son un par de idiotas -rio Yure- y así fue como Say perdió la virginidad, pero hay un problema -dijo acercándose a mi- ¡¡estoy embarazado, Say!! ¡son trillizos! ¿¡me vas a dejar así!? -se lanzo a mis brazos- ¡también son tus hijos!

Y estallamos en risas, es que con estos bobos no hay remedio, son mi única familia, todos ellos, todos mis amigos.

-¿¡Que mierda!? -alguien dijo mientras nos miraba estupefacto- tomaron drogas, es eso.

-¿Kler. amor? -dijo Yure- ¡amor! hace años que no te via, ¡seremos padres! -decía mientras se montaba a caballo a la espalda de "su amor".

-¿Okaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaay?

-¡yo quiero ser el padrino! -dijo emocionado Taw.

-¡y yo la madrina! -agregue yo.

Nos empezamos a reír todos menos Kler, se podría decir que es el mas serio del grupo.

-Bueno, yo venia a decirles que...-Kler no pudo terminar su frase por otra voz proveniente del mas alla.

-¡¡VENGAN A COMER O COMERAN LAS SOBRAS!! -grito una vieja uniformada de este lugar.

MadreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora