A tu ritmo || Zarry Stylik

Capítulo 01.

Harry no podía quejarse; no debía quejarse.
Su madre había decidido pasar las vacaciones de navidad y año nuevo en Bradford, junto con su hermana Trisha y sus padres, ¿lo único malo? Decidió arrastrar a la familia con ella.

La decisión de Anne no fue del agrado de sus hijos; Gemma tuvo que denegar una invitación de su mejor amiga para viajar un par de días a Venecia, y Harry; bueno, Harry tuvo que cancelar sus planes de maratones de películas de Harry Potter y los Piratas del Caribe mientras esperaba que la navidad pasase rápido.

No es que los hermanos Styles odien Bradford, simplemente la hermana de su madre era casi como una desconocida para ellos. Han pasado años desde la última vez que se juntó toda la familia; desde que hablaron, se vieron cara a cara e interactuaron unos con otros. En las redes sociales, Harry podía ver que ellos estaban bien, se enteraba de todo, pues al parecer las chicas Malik usaban sus cuentas como su diario personal. Gemma y Harry se burlaban bastante de ese hecho.

Después de hablar (o más bien discutir y replicar con miradas y palabras) con su madre, los hermanos Styles yacían dentro del auto estacionado frente a la casa de la familia Malik. Gemma ignoró todo y se encerró en su pequeña burbuja con un título que dice: "no me importa tu vida, no estorbes", como lo había hecho en todo el viaje, y se dedicó a textear con sus amistades, mientras que Harry inspeccionaba el lugar desde la ventana.

—Nada de malas caras o palabras inapropiadas. Si quieren, después de saludar y de instalarse pueden ignorar a todos, pero mientras eso no pase espero total educación por parte de ustedes, ¿está bien?

Harry asintió a las órdenes de su madre. Así que, después de colocarse los audífonos, tomó la mochila con sus cosas privadas y bajó del auto.

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—¿Esto es totalmente necesario? —replicó el moreno, colocándose de mala gana una buena cantidad de gel sobre su cabello.

Del otro lado de la puerta del baño, Trisha terminó de colocar las almohadas a la cama extra que habían colocado en esa habitación para Harry, el hijo de su hermana. Dio un largo suspiro al oír a su hijo y se preguntó por qué era tan difícil para él aceptarlo. Sus otras hijas habían estado encantadas con la idea de recibir a la familia Styles, ¿por qué Zayn no estaba feliz o al menos de acuerdo con ese plan?

—Zayn, ya lo hemos hablado —la mujer se inclinó para alizar las sábanas de la cama y se sentó en la cama de su hijo cuando le pareció que la otra ya estaba perfecta—. Ellos son nuestra familia también, quieren pasar tiempo con nosotros y no se los voy a negar.

Cuando por fin estuvo listo, se dio un último vistazo al espejo y salió del baño para entrar a su habitación. Zayn lucía espectacular; con un conjunto de jeans y chaqueta de cuero negro, una camiseta blanca, botas al estilo motociclista y un peinado que hacía resaltar la dureza de sus facciones. No había rastro de emoción en su rostro.

—No han venido en años, no se molestan en escribir o en preguntar cómo estamos, ¿y ahora, de la nada, quieren pasar navidad con nosotros? Ma, debes estar bromeando.

—Siguen siendo familia. Además, yo sí tengo comunicación con ellos, al igual que tus hermanas, no es problema mío el que tú no quieras entablar comunicación con ellos.

—Son unos niños ricos y mimados —Zayn casi hace una mueca de desagrado, pero se contuvo al escuchar un auto estacionándose frente a su casa.

Su sangre se heló. Unos preciosos orbes verdes aparecieron en su mente y se maldijo internamente. Los recuerdos que había estado evitando todo este tiempo, desde que se enteró de que los Styles pasarían navidad y año nuevo bajo su techo, todo salió a flote; recuerdos de la infancia y otro tipo de pensamientos.