La Nefelibata del Universo

pensamientos

acababa de llegar, estaba cansada así que mire por mi ventana como todas las noches antes de dormir tome mi libreta y me dispuse a ver las notas de las sinfonías.

Algo mas de lo que tenia en mi cabeza y en mi corazón, me encantaba cuando me pasaba eso porque me sentía como una estrella mas que brillaba cada vez mas y mas con cada sonido que imaginaba sentía como la música brotaba por cada molécula de mi cuerpo aun estando cansada; la luna me hablaba de eso no tenia ninguna duda cada vez que quería expresar algo o decir celo a alguien ella era mi mejor consejera, ella era mi mejor amiga y esta vez no fui yo quien la llamo si no que, ella estaba tan hermosa que no me pude resistir.

Así que acudí a su encuentro salí de mi habitación corrí por todo el edificio subiendo escalones hasta el ultimo piso sentía que cada escalón era una montaña por subir eran demasiados y mi falta de fuerza no me ayudaba del todo.

Cuando llegue me quede mirándola era simplemente inexplicable no podría describirla ni siquiera usando las palabras mas osadas de este mundo, así que empece a componer una nueva canción tratando de entender todos los sonidos que ella me enviaba, lo hacia tan velozmente que hubiera podido ganarle a cualquiera no quería olvidar todo lo que me enviaba ese podría ser el encuentro mas hermoso que hubiese tenido conmigo misma a través de la música.

Entonces note una presencia diferente que nunca había visto; lo cual me pareció extraño porque yo era la única que conocía ese lugar o al menos hasta ese momento, estaba un tanto confusa por la situación pensé que lo había imaginado mi mente, la ignore fingiendo no haberla visto y seguí escribiendo notas sobre las hojas de mi libreta.

En ese preciso momento la presencia que detecte salio de entre las sombras fue entonces cuando me di cuanta de que era un chico

no puede ser.. el esta aquí...

era Joah Wilworth, me sorprendió quería decir algo pero no sabia como responder a la situación, creo que ninguno de los dos lo sabia hacia que solo nos quedamos ahí mirándonos sin decir nada.

El era el típico "chico malo" era demasiado alto usaba unos pantalones de mezclilla, una camisa negra en la parte posterior abierta hasta el segundo botón de la misma y con un cabello largo y desalineado hacia arriba, tenia unos ojos cafés unos malditos ojos cafés que aunque eran de color común te hipnotizaban con solo mirarte y su mirada era fulminante nunca había visto a alguien que mirara igual parecía como si te acariciase con la misma...

el era ... tan impresionaste solo lo había visto un par de veces pero nunca tan de cerca, en cuanto lo vi me di cuenta que esa era una coraza que utilizaba para que no lo lastimaran, por todo ese minuto que nos quedamos mirándonos observe cada detalle de el y el de mi.

Miro hacia mi mano derecha porque estaba tratando de esconder mi libreta y comprendió porque estaba ahí, pensé en hablar era la única manera de distraer la tensión de ese momento...

-¿porque estas aquí?- dije con un poco de curiosidad en mis labios

-por la misma razón que tu- su respuesta no era de concreta pero aun así quería conocer la razón y fue entonces cuando hablo hacia mi por segunda vez

-nunca he conocido a alguien tan estúpida como tu- dijo con una voz mas sarcástica que de costumbre, ¿porque? ¿porque pensar algo así de mi?

-¿es porque nadie en el mundo parece interesarle?- dije un poco molesta por la expresión en su rostro

-No, es por el hecho de que tal vez deberías concentrarte en el mundo real, en vez de esconderte tras esa ridícula libreta- empezaba a irritarme demasiado una cosa era insultarme a mi y otra muy distinta a mis sueños y mi música no podía contenerme mas