Y fue en aquél día cuando me di cuenta que mi vida cambiaria. Gracias a las series de televisión descubrí un nuevo mundo, el mundo del crimen. Gracias a los famosos programas supe a lo que quería dedicar mi vida. Sería difícil acostumbrar mi vida a ver personas sin vida a las que anteriormente les habían amputado miembros del cuerpo sin cuidado alguno, les habían aplicado las peores torturas... sería difícil dormir después de que los familiares de las victimas te suplicaran que encontraras a la persona que les hizo pasar los peores momentos de sus vidas. Sería complicado al principio, pero después de todo eso, encontrar al asesino es la mejor recompensa, sabes que no vas a poder hacer nada por la victimas pero también sabes que la "persona" que hizo aquellas cosas todas horribles no las va a volver a hacer a más gente.
La gente dice que este trabajo es difícil, que es mejor ser abogada, pero yo no pienso así. Pienso que es mejor detener al culpable que no defenderlo.