Un cambio por amor

embrazada. que diablos ocurrio

El primer indicio de que algo grande ocurrió esa noche fue el hecho de no estar en el compuesto del clan, Izuna Uchiha acababa de ver el túnel negro del licor en sus 17 años y ahora pagaba las consecuencias.

Izuna se sentó lentamente, abrió los ojos carbón oscuro pero los volvió a cerrar cuando se llevo la mano a la cabeza en dolor.

"Maldita Resaca" Se quejo el joven Uchiha, abrió nuevamente los ojos y vio que estaba en un prado verde con flores, "¿Cómo demonios termine aquí?" Fue su pregunta.

Lo último que recordaba era que sus primos Takashi y Shima lo llevaron a un pueblo por unos tragos, cuando llegaron al bar y tomaron un número de botellas que no recordaba en celebración de una misión exitosa contra el clan Senju, después las imágenes misteriosas de un puerco espín blanco y un zorro dorado de ojos azules, después todo era borroso y poco claro.

Izuna suspiro, cuando la brisa roso su pecho, se miro a sí mismo y vio que estaba prácticamente casi desnudo.

"¿Por qué estoy casi desnudo?" Otra pregunta sin respuesta, miro a su alrededor y diviso su ropa a un lado, tomo la ropa, esta tenía un olor extraño, era Naranja y Menta fresca, combinado con el olor común a Vainilla que traía su camisa, sin saber cómo llegaron eso olores a su camisa, se sintió extrañado por el hecho que le gustaba.

"Creo que me estoy enfermando" Dijo para sí mismo, se puso la camisa y el resto de su ropa, miro el paisaje a su alrededor y vio una Marca distintiva en un árbol, el Uchiha Símbolo eso quería decir que estaba cerca del compuesto de su clan, con un suspiro Izuna se encamino a casa, seguro su hermano mayor Madara Uchiha estaría torturando a sus primos hasta sacarles su paradero.

"Mejor iré a ver qué paso en mi ausencia" y con eso Izuna Uchiha se encamino a su casa, no sabría lo que paso por algún tiempo.

Pero después, querrá quedarse con uno de los resultados y con un miembro de la ecuación.

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En otra parte, en algún lugar diferente.

La luz del sol reflejaba, iluminado por entre las hojas de los arboles. Otro indicio del gran evento sucedido la noche anterior. Tobirama Senju ya estaba despertando pero con un horrible dolor de cabeza,

"No importa cuánto bebes siempre tendrás resaca al día siguiente" Dijo sentándose y pasándose la mano derecha por el pelo. Tobirama acaba de despertar de una noche de bebida y ahora pagaba las consecuencias.

El sonido de las risas de sus primos y de su hermano le resonaba en los oídos, sus adorables Primos mayores Taiga y Hayato, junto con su Precioso Hermano mayor, le arrastraron fuera del compuesto esa noche, con la pobre excusa de que tenían que relajarse, era obvio que era alguna treta para burlarse de él. Pero igual bebió y ahora tenía la horrible resaca.

Fue cuando Tobirama se dio cuenta de un detalle muy importante, no estaba en el compuesto del clan Senju, estaba en medio del bosque, la luz del sol pasaba por las ramas de los arboles, las flores caían con la suave brisa de la mañana, el aire roso su espalda, fue cuando el albino Senju, se dio cuenta de un detalle muy importante que paso por alto y que de seguro era lo más obvio para cualquiera.

"¿Dónde estoy? Y mas importante aun ¿Dónde está mi ropa?" Eran las preguntas que se hacia el joven Senju de 17 años, solo llevaba puesto los pantalones negros y estos estaban desabrochados, después de abrocharlos como es debido, Tobirama encontró su camisa Shinobi negra.