Apenas se pueden contar con los dedos de ambas manos los años de amistad, pero usaban de estas para abrazarse y darse inocentes caricias cálidas. No era necesario un paseo por el parque para amarse, pero cuando sus dedos se entrelazaban era inevitable sentirse bien.
No podían negar que, después de tantos años de amistad, el amor había nacido dentro de sus corazones, ellos se pertenecían el uno al otro.
Aun no superaban las mariposas dentro de sus estómagos revolotear con cada mirada que se dedicaban, con tan solo su presencia ellas movían sus alas. E incluso en los peores momento, ellos estaban ahí, juntos.
Y cuando se preguntaban ¿Cómo llegaron hasta allí? No era necesario preguntar en absoluto. Si, después de todo este tiempo, era inevitable.
En las noches, recuerdos eran narrados por la boca de ambos. Y una de esas noches, Krystal se animó a decirlo. Allí acurrucados en el sofá con una manta cubriéndolos y con los dedos entrelazados, era el momento perfecto.
-Te amo- ella pensaba que, luego de decirlo, Kai sentía el mundo caer sobre sus hombros, pero lo que en realidad no sabía es que él se sentía como si flotara luego de besarla «También te amo» Y eso era lo único que necesitaba escuchar la chica.
Esas tardes en las que cantaban sus canciones favoritas, no median el tiempo que pasaba y aun así parecía el principio de la eternidad.
Algunas cosas tenían sentido y otras no, solo podían superar esos momentos juntos. No creían que, los que se hacían llamar fans suyos, hicieran semejantes cosas solo para que no estén juntos. Pero los pocos comentarios de apoyo siempre ocupaban un gran espacio en su corazón y gracias a ellos sanaban.
Con solo estar juntos ellos se sentían más vivos que nunca, llenos de amor. Tal vez era demasiado y aun eran muy jóvenes, no sabían diferenciar entre lo real y lo irreal. Pero lo que sentían era más real de lo antes habrían sentido, y no sabían cuánto iba a durar aquello pero querían que pareciera eterno el solo estar juntos.
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Together «KaiStal»
FanfictionNo importaba en que situación, lugar y tiempo, solo querían sentir que era una eternidad el estar juntos.