Culpable

Capítulo 1

Como cada tarde después del instituto, Holly y Aurora iban a la biblioteca municipal a estudiar:

-Holly, tengo ganas de ir a la playa, ¿nos vamos este finde?

-No puedo Aurora, sabes que tengo que trabajar.

-Siempre tienes que trabajar. Nunca puedo pasar tiempo con mi mejor amiga.

-¿Crees que a mi me gusta trabajar?

-Si lo haces tanto, por algo será...

-Joder Aurora. Mira, vamos a dejar esta conversación porque es imposible hablar contigo. Demasiada paciencia estoy teniendo.

-No Holly. Perdón. No quería que te enfadaras.

-No me enfado, simplemente me molesta.

-¿Y si te pago yo el viaje?

-Shhhhhhh -Dijo la bibliotecaria mandándoles callar.

-¿También le vas a pagar a mi jefe por no ir al trabajo durante 3 días? -Dijo Holly susurrando.

-¿Eso se puede hacer?

-Adiós Aurora. Me rindo. -Dijo Holly mientras recogía sus libros y se iba de la biblioteca.

Aurora y Holly tenían cientos de peleas como esta todos los días, pero de algún modo, siempre se reconciliaban.

-He sido una tonta Holly, perdóname.

-Aurora no puedo hablar ahora mismo, tengo prisa, entro a trabajar en menos de media hora y todavía ni me he vestido. Voy a apagar el móvil, luego hablamos.

-¡No espera!, ¿me perdonas?

-Si Aurora, te perdono. Ahora déjame que llego tarde.

-Vale, ¡te quiero!

-Yo también te quiero.

Holly trabajaba de martes a sábado por las noches en un bar donde había música en directo, sobre todo jazz.

Su familia necesitaba ese dinero extra para poder pagar todos los gastos.

Ella era la más mayor de 5 hermanos, de 2, 4, 5 y 12 años, por lo que todavía ninguno de ellos trabajaba.

Intentaba compaginar sus estudios de bachiller con el trabajo, y lo hacía bastante bien.

-Tan puntual como siempre.- Le dijo su jefe cuando ésta llegó al bar.

Ella no respondió. Simplemente le sonrió y comenzó a servir en la barra.

-Holly, ¿Qué haces al salir del curro?- Le dijo Mike, otro camarero del bar.

-Estudiar.

-¿De verdad? ¡Vamos Holly! ¡Es jueves! ¡Jueves universitario!

-Te recuerdo que hasta el año que viene no soy universitaria.

-Pero así te vas preparando...

-No se, me lo tengo que pensar.

-Está bien, cuando salgamos del curro te volveré a preguntar.

Los dos continuaron con su trabajo.

Mike no era muy bueno como camarero. Lo suyo era ser abogado. Acababa de terminar la carrera de derecho, pero como no encontraba trabajo, había decidido ser camarero mientras tanto.

Nadie sabía nada de Mike.

Era un misterio.

-Mike, la mesa número 5 está esperando.