Es de día, sábado, otro fin de semana más, excepto por alguien en mi cama, veo a Niall tumbado a mi lado. Suspiro. Recuerdo que nos abrazamos hasta dormirnos. Le miro mientras duerme agarrado a una de mis almohadas, es guapísimo. Un tío que cualquier chica podría desear. Sigilosamente me levanto de la cama para no despertarle, después de mucho tiempo recojo algunas cosas del suelo y voy hacia mi armario de donde saco una camiseta de tirantes y unos shorts vaqueros. Suspiro y me miro al espejo. Detrás de mi veo a Niall despierto y mirándome. Me pongo roja y sonrió tímidamente.
-Buenos días- Le digo sacándole la lengua a través del espejo.
-Nosotros no…¿no nos acostamos verdad?- dice nervioso y frotándose el pelo.
-CLARO QUE NO.- Le grito, aunque sonrio y ni yo misma sé por que, quizas es porque me ve lo suficientemente humana como para tener sexo conmigo.
Me doy la vuelta y le miro, y veo que sonríe.
-Eres…- me dice mirándome a los ojos y por una vez tengo miedo de lo que va a decir.
Doy unos pasitos hacia él y me coloco en el borde de la cama.
-¿Qué soy?- Espero lo peor y escondo mi nerviosismo en lo mas hondo de mi pecho.
-No puedo decírtelo…- Se levanta de mi cama y coloca sus manos en mis caderas.
Abro los ojos. Y le vuelvo a mirar confundida.
“Así que no sientes nada eh…” Mi vocecita vuelve a las suyas y yo la ignoro.
-¿Quieres desayunar?- le pregunto, evitando ese tema de conversación.
Sé que se muere por saber de mí, de quien es ese niño, de mi vida, pero yo no estoy dispuesta a contarle nada de momento.
Él asiente frenético y bajamos las escaleras, al mirar hacia atrás para sonreírle, tropiezo en un escalón y sus brazos rápidamente me cogen y me pega contra sí.
-Torpeza la mía.- Susurro separándome un poco de él.
-Ajá…-me mira directamente a los ojos- Daría millones por saber qué piensas…
Le miro. ¿Quiere saber que pienso? Creo que es la única persona que quiere saberlo.
“Cuéntale, o si no…” Vuelvo a hablar conmigo misma como si sirviera de algo.
“O sino bésale…” Me sorprendo a mi misma pensando aquello, pero me pego más contra Niall y junto mis labios con los suyos. Es increíble lo bien que me siento cuando nos rozamos.
Niall me coge por detrás y me levanta pegándome la espalda a la pared, corresponde mi beso, haciéndolo no solo mío, de los dos. Sus tiernos labios saben realmente bien, son suaves, cálidos, y algo me recorre por dentro, algo que no sentía desde hace mucho, y quiero aceptarlo, cogerlo, hacerlo mío. Niall me sujeta por los laterales de mis finos muslos y yo tengo mis brazos alrededor de su cuello, seguimos besándonos hasta que al final tengo que coger aire y esa corta felicidad desaparece.
-Hacía mucho que no me sentía tan viva…- le confieso a su oído mientras le abrazo.
Niall me mira y sin pensárselo dos veces sus labios vuelven a saborear los míos, pero esta vez con más delicadeza.
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Un paso hacia adelante, dos hacía atrás. (Editando)
Teen Fiction¿Que haces cuando lo que te queda es oscuridad y miedo, miedo de mirar hacia atrás? Lucía solo recurre a mas oscuridad para volver su pasado algo más blanco.