No tengo nada viviendo en mi nueva casa, la cual es muy diferente a la que tenía antes. Está casa es más grande y está ubicada en una de las mejores zonas de la ciudad, lo cual es radicalmente diferente a donde vivía antes, una humilde casa con 4 habitaciones y 1 baño en toda la casa que estaba ubicada en frente de una avenida de las más transitadas, así que era muy difícil dormir por todo el ruido y en mi niñez no tuve ni siquiera la oportunidad de aprender a andar en bicicleta por lo mismo que no había ningún tipo de parque ni lugar en el que pudiera andar.
Le supliqué a mi mamá que me dejara estudiar en la misma escuela antes de cambiarme de casa. En cuanto terminé sexto de primaria me dijeron que junto el cambio de casa también cambiaría de escuela, lo cual también significaría para mi cambiar de amigos. ¿Porqué lo hizo? Ella sigue diciendo que porque la escuela ahora ya nos queda muy lejos y que en el nuevo colegio que voy a estar será una gran oportunidad para mí, haré muchos más amigos y bueno, miles de excusas más.
Conocí la escuela, es muy grande, casi casi como una ciudad llena de edificios y mucha gente por todos lados. En mi antigua escuela éramos 1 salón por grado y 23 alumnos en el salón, en esta escuela son 5 salones por grado y 30 o más por salón, que es demasiado grande para mi gusto. Soy de un mundo muy diferente a éste, no se si mi mamá tenga razón en eso de que haré muchos amigos y amigas aquí, sólo se que daría lo que fuera por regresarme a antigua escuela con todos mis amigos.
-Levantate, ya es hora -Me dice mi madre y me mueve para despertarme -Se te hará tarde.
-Odio levantarme a esta hora.
-Pues te tendrás que acostumbrar.
Me levanto y saludo a mi hermano y a mi padre. Mi hermano, al igual que yo, se ve que no le cae nada bien este horario.
-¿Listo? -Me dice mi padre.
-Para que te miento.
Alisto las cosas en mi mochila para partir, pero me doy cuenta que son demasiados útiles y cuadernos para que poder entrar en mi pobre, gastada pero fiel mochila. Voy por unas bolsas grandes de plástico que saqué de la cocina y meto ahí todo lo que no entró.
Llegué y me encontré con que el colegio es más grande de lo que yo pensaba, era unas 10 o 15 veces más grande que mi antigua escuela.
-Hasta aquí llego yo mis niños, diviertanse mucho.
-Gracias papá -Le decimos mi hermano y yo.
Me despido de mi hermano ya que vamos a diferentes edificios.
-Nos vemos al rato, suerte -Me dice.
Estoy en frente de un gran edificio rojo, de 3 pisos y quien sabe si tendrá algún sótano, porque realmente no me sorprendería. Mi salón queda en el tercer piso así que tendré que subir todas esas escaleras todos los días, con tan solo pensarlo ya me dolieron las piernas.
Estoy enfrente del salón en el que aprendería y conviviría con gente nueva durante todo un ciclo escolar. Aula 4, aquí voy.
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Llorar, Pero No Por Lo Que Crees
RandomEn mi vida no hay nada más que pudiera pedir, aunque podría cambiar algunas cosas. En esta vida mi novia lo es todo para mí, es mi apoyo incondicional con la que cuento siempre, la única que sabe todo de mi, desde mi pasado hasta quien soy hoy. Tam...