Capítulo 2

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RINGGGG
El sonido de la campana hace que todos nos pongamos de pie y salgamos del salón para dirigirnos a la cafetería. Verónica viene caminando hacia mí cuando alguien se interpone entre nosotras.

- Hola Allison
- Alyssa - corrijo a Cristina, la reina de las perras
- Como sea - dice
Me escanea con sus ojos cubiertos de maquillaje y luego dice:
- Bueno, ya me voy, no debo pasar mucho tiempo cerca de la basura. - y vuelve a mirarme de manera despectiva.

Aprovecho para contestar.

- Debe ser difícil no poder estar cerca de ti misma.

Verónica ahoga la risa y Cristina se va, después de rodar los ojos, junto con su perrita faldera.

- Vamos por un sandwich - le digo a mi amiga entre risas

Después de comprar el almuerzo y sentarnos sobre el pasto, señala a un chico cerca de nosotras y dice:

- Solo mira a ese papi.

Por más que trato de contenerlo, comienzo a reír.

- El - digo entre risas - te escuchó.

En cuanto digo esto, toda la cara de Vero se torna roja, por lo que no se puede diferenciar sus labios del resto de su cara.

Al ver su reacción, el chico se nos acerca.

- Hola, por cierto, mi nombre es Alberto, no papi.- dice con una gran sonrisa en su cara, cosa que hace que Vero se ponga más roja...si es posible.

- Lo siento, si hubiera sabido que podías escucharme diciendo tonterías me lo habría reservado. Por cierto, soy Verónica, encantada de conocerte.

Mi amiga le tiende la mano a Alberto, quien la estrecha gustosamente.

- ¿No me vas a  presentar?- le pregunto a Vero mientras arqueo una ceja, quien al ver al chico, se olvidó por completo de mi existencia. Ante este comentario parece un poco avergonzada. Bien. Uno no anda por ahí en la vida olvidando sus amistades al conocer a alguien atractivo.

- Ehmm...si. - dice viéndome, luego se vuelve hacia Alberto - Ella es Alyssa, mi mejor amiga.

El chico me extiende la mano y estrecha la mía

- Gracias, así está mucho mejor.

Después se voltea hacia Vero.

- Ehmm...bueno, yo soy nuevo por aquí, y me preguntaba si tal vez me podrías dar un recorrido por la escuela.

Mi amiga me voltea a ver preguntado si esta bien. Le doy un ligero asentimiento con la cabeza. Enseguida se pone de pie y comienza a caminar junto a Alberto.

Para pasar el rato, decido sacar mi libro, y en cuanto lo tengo en mis manos, me acuerdo de Alex, quien me enseñó a amar a Harry Potter como si fuera uno de mis amigos.

Recuerdo que jugábamos persiguiéndonos con plumones diciendo que eran varitas mágicas... Wow, que tiempos...

Eso me recuerda que me he estado comportando como una perra con él. No puede ser tan malo vivir con los Robles ¿o sí? El ya me dió la oportunidad que intentáramos vivir solo nosotros dos, en nuestra pequeña burbuja por un año entero, pero no funcionó.

Después de las tres clases faltantes para la salida, al fin veo a Vero.

- ¿Qué tal te fue con Alberto?

Su cara se ilumina.

- Excelente, de hecho tenemos dos clases juntos. Y es taaan lindo... Cambiando de tema, ¿qué vas a hacer hoy por la tarde?

- Primero que nada, disculparme con mi hermano. Después creo que voy a ver tele o leer. ¿Por qué?¿Quieres venir?

- No se porque preguntas si ya sabes la respuesta

Y así nos dirigimos a la casa de los Robles...mi casa.

Bueno, si estás leyendo esto significa que acabas de leer el segundo capítulo de mi novela, así que ... Gracias.
Att. LadyCaramelo

Hasta el amanecerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora