Capitulo 1

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-Él es MÍO, perra.-dijo Samantha desenvainando su espada, lista para el combate.

-JA. No me hagas reír. ¡Él es mi senpai! No pienso compartirlo con nadie- Contestó Allyson, también lista para pelear a muerte.

-Sigo sin entender por qué pelean por un chico. Acaba ya y vámonos, Sam-dijo Scarlett recostada contra un muro y con expresión aburrida.

Con un ágil movimiento,Samantha chocó su espada contra la de Allyson, quien bloqueó su ataque. Ambas expresaban el fuego en su mirada, ese que reflejaba determinación, el latente amor hacia senpai, y la certeza de que será suyo. Entonces...

¡Wow, wow, wow! Calmate, ¿Quieres? Si vamos a contar esta historia, hay que hacerlo bien.

Primero, hablemos de Senpai.

Es un chico algo tímido, aunque no lo demuestra. Tiene... o bueno... tenía a la mayoría de las chicas del Instituto enamoradas de él. Si tan solo estuvieran vivas...

Pero, ¿Cómo no enamorarte de él? Era jodidamente perfecto. Ojos cautivadores de un azul intenso, un cabello que reflejaba la oscuridad de su interior, su pelo negro como el vacío en donde se puede encontrar el más puro amor, solo con una mirada puede inspirarte tranquilidad y ademas de una sonrisa encantadora, una risa que hace que inmediatamente tu corazón se acelere. Te ríes de todos sus chistes, sean buenos o malos, por el mero hecho de que él los contó. (O bueno... no. Sólo las chicas que estaban tras él simulaban que les hacía gracia sus chistes. De verdad, esos chistes eran malísimos.)

Él era un gran chico. Era simpatico y amable con todos. Y pues eso, como estaba bueno, y además era "todo un caballero", la mayoría de las chicas iban tras él.

Ahora está Samantha. Será de la primer Yandere de la que vamos a hablar.

-No debiste acercarte tanto... a mi senpai.-arrojó el cadáver en un baúl, donde normalmente colocaban los balones y objetos deportivos- Además, te sonrió. Lo mereces.

Esta chica está bastante loca, como han de notar. Acosa a las "sospechosas" y si nota algún indicio de que están enamoradas de senpai (o si están más buenas que ella), las mata sin piedad.

Su cabello es negro, le llega por la espalda media. Tiene ojos cafés. Ya saben, una "chica del montón". Es muy idiota, y es sorprendente que los policías aún no la hayan atrapado.

-Maldición. Tu estúpida sangre me ha manchado el uniforme.- dijo mirando al baúl. Ja, como si pudieran oírle- Bueh, tendré que cambiarme.

Por otro lado, está Scarlett.

Una chica de cabello castaño hasta los hombros y con un flequillo que le cubre el ojo izquierdo, tiene ojos verdes pero sin brillo alguno, cuando la mirabas sentias ese vacio en su alma; era como si te undieras dentro de el oceano y por mas que trataras no lograrias salir asi que terminarias ahogandote.

Ella no mataba, o al menos no lo hacía, hasta que conoció a Samantha.

Ella era una chica tímida, insegura, siempre estaba sola y había un grupo de chicas que la molestaban constantemente. Ella intentaba ignorarlas pero se le hacía imposible, ya que con solo verlas se le hervía la sangre.

Ah, y ella no estaba enamorada de senpai (para su buena suerte). No le interesaban los chicos. Era independiente, y eso estaba bien para ella.

Allyson sólo era una yandere más.

-Ally, ¿vamos ya a casa?

-Adelantate, Steph. Tengo... asuntos que resolver.- murmuró, mirando a una rubia menear sus caderas de forma "provocativa", hacia SU chico. Además se veía patética. Nadie camina moviendo así sus caderas.

Nah, va a morir. Por perra barata.

Allyson ya estaba planeando cómo hacerla sufrir lenta y dolorosamente.

Y bueno... hay que ver una cosa. ¿Quién está más loca?

°•°•°•°•
Nota de autoras:
Bueno, comenzaremos diciendo que sabemos que este tipo de historias pueden ser muy común. Pero queremos hacerla de todas formas, a nuestra manera, así que si no te gusta, no nos juzgues ;-;

Y también hay que recalcar el hecho de que van a haber partes muy estúpidas, e lógicas. Como por ejemplo que la policía no las capture nunca. Pero, meh. Es una historia ficticia, así que YOLO.

Es MI senpaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora