El silbido que busca más allá de la muerte

Introducción

Un pájaro de una rara singularidad migraba de un lugar hacia otro; con mucho entusiasmo miraba las grandes bandadas de aves en busca de otros como él, pero en cada viaje y en cada año transcurrido nunca encontró a otro pajarillo similar. 

Las demás aves al verlo se extrañaban, jamás habían visto a un ser emplumado de sus características. Habíase dado cuenta entonces que estaba solo. 

Cansado y un tanto viejo el avecilla había decidido ya no migrar, divisó en una de las montañas a un árbol, que como si de un desafío a la naturaleza se tratase, había crecido apartado de los demás en un sitio imposible, casi en la roca desnuda en el árido suelo. 

Fue allí y se posó tranquilo en una de sus ramas, poco a poco el sueño le inundo y durmió para ya no despertar. 

Pronto vino una ventisca que pasaba incesantemente produciendo un silbido por entre las ramas de aquel solitario árbol. 

Aquella ave sin saberlo, en su vida no estuvo sola, había sido compañera del viento en cada uno de sus largos viajes; este al darse cuenta que el ave ya no estaba le añoraba y de tanto en tanto le buscaba en las ramas a su paso.