Capítulo 36

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Si insistía, tenía miedo de que se retiró, y el Kelly y no podía correr el riesgo. Fue por la chica, se recordó. El niño necesita un padre real, podría enfrentarse a ella y al resto del mundo, sin ningún tipo de restricción.

Parte de ello sufrió el hombre apacible y traje, obligados a esconderse. El hombre que quería ahorrar sufrimiento a los demás, pero sufrió solo, escondiéndose en las sombras.

Anahí se dio cuenta de la forma en como Alfonso. Y tenía miedo. Había sido muy afectado por Pablo, pero reconoció que Alfonso era capaz de ver más allá de las apariencias.

De una manera que se parecían. El accidente cambió su vida por completo, cambiando los planes y prioridades. El compromiso roto había cambiado su vida, por lo que darse cuenta de que pocas personas podían confiar. Y era difícil encontrar a alguien para ver cómo era realmente, y no sólo su belleza.

Alfonso pensó que era demasiado hermosa para desear un hombre como él. Pero no me di cuenta de que no podía ver las cicatrices, no se dio cuenta cuando trató de ocultar cojeando ligeramente. Ella había sido encantado por la voz en la oscuridad, con besos ardientes que dejaron su cuerpo en llamas, el hombre que logró ver en ella el artista oculto.

Y se preguntó cómo podía haber caído en el amor con un hombre que no se podía confiar, ni siquiera lo suficiente para mostrar su rostro.

En su habitación, Alfonso caminaba de un lado a otro, como un animal enjaulado. Más allá de las paredes, la tormenta arreciaba, y se sentía cada viga, cada trueno, haciendo eco en su cuerpo. Digitación el pelo, todavía húmedo del baño, se frotó el dolor de cuello. Yo quería ir con ella, tocarla, aun sabiendo lo que era peligroso. Para los dos.

Anoche lo demostró. Bastado un toque y todo el autocontrol desapareció.

Anahí quería lo que no podía darle. Permitir a otro ser humano, y Dewey, para ver. No entendía lo que eso significaba. No podía correr el riesgo. ¿Y si ella lo rechazó? ¿Cómo se sentiría entonces?

Viviendo en las sombras corría con él, dejándolo más miserable cada día. Echaba de menos el sol, entrando en una habitación con las luces encendidas.

Me perdí Anahi.

Alfonso miró a la gran puerta de arco, al darse cuenta de que el viento rugió tan fuerte en los pasillos que parecían abrirlo.

Acercándose a ella, puso su mano en el pomo de la puerta decorada. Por un momento, vio las cicatrices en la piel y flexionó los dedos. Luego se giró el pomo y la abrió.

Anahi estaba sentado en el sillón junto a la ventana, con las piernas dobladas hacia un lado. Sólo una pequeña lámpara brillaba en la esquina de la habitación, y se dio cuenta de cómo ha acostumbrado a la oscuridad.

Un rayo cayó cerca, la luz parpadeaba, salió y regresó a continuación.

En ese momento, sabía que Alfonso estaba allí. Su cuerpo se estremeció con anticipación, y agarrando su bata contra su cuerpo, se dirigió a la puerta.

- ¿Qué haces aquí?

- Sinceramente, no lo sé.

Por lo menos era honesto, pensó Anahi.

- Sit - invitado.

Dio un paso hacia ella y se detuvo.

- Mi Dios, qué frío hace aquí - dijo, va a la chimenea y poner más madera.

- No soy frío.

- Es húmeda. Usted va a terminar mal. Y tal vez al final la luz. Alfonso encendió un fósforo y la pequeña llama encendida suavemente su cara.

Anahí vio las marcas en el cuello.

- No tener que hacer eso.

- Yo sé.

- Sal, Alfonso.

- Estás cansado de mi empresa?

- Es claro que no. Pero sé que no es seguro. - Suspiró. - No se puede imaginar lo mucho que quiero que me toques. Pero quiero más, además de estar en sus brazos - confesó con sinceridad. - Quiero que todos ustedes.

Se puso de pie, sosteniendo un pedazo de madera que pondría a las llamas.

- No sólo quieren el hombre en la sombra, la voz que me hace sentir vivo cuando dices mi nombre. No sólo el cuerpo, no me dejan tocar por completo. - Hizo una pausa como si necesitara coraje. - He tenido la mitad del amor y la atención de un hombre. He tenido las migajas ... - Anahi tragó antes de continuar: - No voy a aceptar de nuevo.

El Bello y la Bestia •AyA• (Versión en español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora