Capítulo 11

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Nadia

Tras varios días pesados, pero emocionantes, al fin llegó el viernes y mi primera semana de universidad está por terminar. Con algo de negligencia, tengo pensado quedarme a ver algunas películas en mi cuarto y hacer unos cuantos trabajos que tengo pendientes, ya que Jade se fue a casa de sus padres.
Mi teléfono empieza a vibrar en mi mesita de noche.
Lo tomo y tal y como había imaginado, es un mensaje de él.

De: ¡Cedric! <3

¡Oye! ¿Estas bien?, Lo siento.

No se cual fue la razón de porque reaccionó de esa manera tan desagradable, pero deberá tener sus razones. Así que decido responderle.

Yo: Estoy bien, perdoname ami.

Él: He extrañado pasar estos días contigo.

Yo: Igual yo.

El: Voy para allá.

Es demasiado mandón, pero lo extraño mucho como para decirle que no. Así que corro y me visto con mis leggins y la primer blusa que encontré y me quedo en mi cama a esperar.
Al pasar unos diez minutos entran a mi cuarto.

-Hola- dice él

Hoy se ve increíble, lleva puestos unos vaqueros negros y una camisa blanca cuello V. Se acerca y me da el cariñoso beso que me regala todos los días en la frente, pero esta vez tarda unos segundos más. (Supongo que , ...porque llevamos una semana, sin dirigirnos la palabra)
Me incorporo y me apoyo en mi closet para preguntarle:

-¿Porque no te cae bien Noah? - le pregunto bastante ansiosa de su respuesta.

Él avanza hacia mí, me toma de la muñeca y me empuja contra la pared, con la respiración bastante agitada, me percato de que su rostro está a tan solo unos centímetros del mío. Quiero preguntar que es lo que esta haciendo, pero estoy completamente paralizada y esos ojos celestes no paran de mirarme.

-Cedric - es lo único que consigo decir.

Mi respiración no se ha ralentizado y puedo sentir como la suya se acelera junto a la mía. Esto me esta matando, y cada segundo que pasa, me parece una hora, hasta que finalmente une sus labios con los mios, provocandome la sensación mas exquisita del mundo.
Con una de sus manos me acaricia la mejilla. Esto sin lugar a duda es lo que estoy deseando desde la primera vez que lo vi. No soy capaz de pensar en que, lo estoy besando con tan solo dos semanas de conocerlo, pero en lo único en lo que deseo concentrarme es en la manera en la que su cuerpo presiona el mío, y en como su lengua danza  junto a la mía.
Hundo mis dedos en su pelo, y lo separo un poco, para recuperar la respiración.
Me mira... Solo me mira...

Es hermoso, sus mejillas están de un color rosado, su pecho se hincha y se des hincha a una gran velocidad. Y su mirada es ... es, la que deseo ver por el resto de mi vida.

Una vez más me toma de la mejilla, pero esta vez, solo deposita un beso en ella. Y con voz bastante baja me dice:

- Hace dos años, tuve mi primera novia, me sentía... enamorado. Todo era un sueño. Tuve una pelea después de una fiesta, y el sujeto al que golpee era Noah. Desde entonces se ha empeñado en querer arruinar mi vida, y inicio un mes después de lo sucedido, robandome a mi novia. Y juró que lo haría con las demás que tuviese. - Sube la vista ami, y añade - No quiero perderte, no te tengo aún, pero no podría afrontar una vez más algo parecido a perderte.

¿Acaso él esta enamorado de ... mí?

-Me he enamorado de ti, Nadia - dice como si hubiese leído mi mente- y no preguntes cuando, porque ni yo lo se.

Y buscando las palabras correctas logro decir:

-El sentimiento, es... completamente mutuo- y lo beso.

Una estrella fugaz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora