I'm not the only one || Charles Aránguiz

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Todo salió mal, se supone que yo hablaría con el Charles y todo se arreglaría, pero no, él me trató horrible, fue tan feo lo que me dijo que no pude evitar golpearlo. Ay soy una idiota, esta mierda con el Charles no puede ser arreglada, siempre terminamos de la misma manera, él diciéndome cosas feas... Así que mejor me retiré de su pieza. Cuando salí no pude evitar romper en llanto, es que no entendía por qué mierda siempre me trataba tan mal, yo siempre intentaba apoyarlo en todo.

—Jose ¿Qué pasó? — dijo el Alexis al verme, solo atiné a lanzarme a sus brazos— Dime qué te pasó— negué con la cabeza, no podía hablar, los sollozos se habían apoderado de mi cuerpo—¿Fue el Charles el que te hizo llorar? — Asentí imperceptiblemente. Luego me aferré fuerte a su pecho, necesitaba consuelo. Él acarició mi cabello, pero sentía que su cuerpo estaba tenso. Cuando mis sollozos fueron decreciendo, él se soltó de mí y comenzó a ir a no sé dónde

—Alexis ¿A dónde vas?—pregunte. ¿Por qué me dejaba sola? ¿A dónde iba?

—A tener una conversación seria con ese hueón— dijo casi echando humo por las orejas. Luego se dirigió en dirección a la pieza del Charles.

—Alexis, NO, vuelve— grité, pero no me escuchó. Mierda, ¿Cómo lo detengo? — Huaso, Huaso— le grité a Mauricio Isla que pasaba por ahí. Él me miró extrañado, nunca le había hablado, pero sabía que era amigo de Alexis— por favor, detén al Alexis, ¡Le va a pegar al Charles! — él negó con la cabeza y suspiró como si estuviese acostumbrado a detener al Alexis de hacer estupideces.

—¿Por dónde se fue? — preguntó.

—A la pieza del Charles— el Huaso asintió y luego se fue en esa dirección. Estuve ahí esperando nerviosa, no quería que pasara nada por mi culpa, tampoco entendía la reacción del Alexis, o sea él no tenía por qué enojarse por lo que pase conmigo y con Charles. Después de unos minutos llegaron el Alexis y el Huaso— Alexis ¿Qué onda? ¿Le hiciste algo al Charles? — él negó con la cabeza.

—Tranquilízate Jose, no le hice nada, solo le dejé unas cuantas cosas claras...

—Alexis, porfa no te pelees con el Charles por mí, no vale la pena... Yo estaré bien...

—Está bien Jose, no me meteré, pero es que me da rabia, no quiero que el Charles cometa los mismos errores que cometí yo hace unos años atrás. Ahora me arrepiento mucho de lo hice y no quiero que a ustedes les pase lo mismo...— él suspiró— Jose, solo no dejes que te haga sufrir—me dio un beso en la frente y luego se fue. No sé qué le habrá pasado al Alexis pero en verdad se veía triste y no me gustaría sentirme alguna vez como él.

                Estoy en Río de Janeiro junto a mis amigas, en el Maracaná exactamente, hoy juega Chile con España. Se supone que debería sentirme emocionada porque para esto vine a Brasil, pero emoción es lo que menos siento, de lo único que tengo ganas es de estar encerrada en mi pieza llorando, soy una estúpida, no sé cómo fui tan tonta para enamorarme de ese imbécil cara de nada. Luego de esa pelea no he sabido nada más de él, ni siquiera había intentado disculparse, me daba rabia porque eso significaba que yo nunca le importé que todo fue un juego para él. Y me lo confirmaba el que ahora estaba ahí en la cancha muy feliz con una sonrisita, mientras yo me sentía como la mierda...

—¿Y a ti qué te pasa? — preguntó la Berni— has estado con esa cara de mierda todo el viaje y ahora también

—Es que peleé cuático con el Charles—dije cabizbaja.

—¡Y por qué no nos habías contado perra! — exclamó la Trini— Cuéntanos po, ¿Por qué pelearon? ¿Por el vídeo? —negué con la cabeza, no tenía muchas ganas de contarles porque no tenía ánimo, pero si no les decía me iban a molestar hasta que lo soltara todo. Así que procedí a contarles todo, desde que salimos al McDonald's hasta la súper pelea.