Sonrió seductoramente con una media sonrisa subida en un lado y se acercó a mí.
- ¿No quieres que te ayude a ponerte una nueva blusa?
- ¿Sabes? La gente como tú es la que me da asco. Tu novia no me cae bien pero no eres nadie para engañarla, sabiendo que puede haber otro que la haga mas feliz que tú.
Rió levemente y se acercó a mi.
- Pero es que tu no vas a decir nada.- Susurró
- No lo diré si me dejas tranquila.
Harry se rió, negó con la cabeza y se fue. Busqué el cuarto de alguna chica y toqué a la puerta. Me abrió una chica no muy alta con el pelo largo y negro,
- Hola, me han manchado la blusa, ¿tienes algo que dejarme? te lo traeré mañana lavado y planchado.
- Oh sí
Sonrió y se acercó a su armario. Abrió las puertas y me lanzó una blusa parecida a la mia pero color crema.
- Quedatela, a mí ya me queda pequeña.- Sonrió
- Oh muchas gracias.- Sonreí y salí de la habitacón cerrando l puerta. Me metí en el baño sin mirar adentro y escuche gemidos.
Habia una chica apoyada en el lababo, y un chico de espaldas a mí.
- Perdon..- Los miré y cerré la puerta. Reí levemente y me metí en una habitación cambiandome la blusa. Me quedaba bastante bien, aunque mucho mas escotada que la otra.
Me miré a un espejo de allí y salí bajando las escaleras. Harry estaba al final de estas con una botella en la mano.
- Estas mucho mas guapa así.- Dijo mirando mi pecho y luego mirandome a mí
Sonreí y salí al jardin, moviendome entre la multitud.
- ¿Quieres bailar?.- Dijo una voz de hombre
Me giré para mirarle. Tendria unos años mas que yo, los ojos rojos, claramente borracho.
- No, lo siento.- Me volví a girar y tiró de mi brazo pegandome a el.
- Ha dicho que no quiere. ¿No la has escuchado?.- Dijo la voz ronca de Harry metiendose por medio de ambos.
Los miré y el borracho de fue. Harry me miró y sonrió.
- ¿Ahora tendré que darte las gracias no?
- O simplemente aceptar pasar la noche conmigo.