El Dolor De Una Ambrosia (Gravity Falls) (Billford) (Yaoi)

Dulce devoción

Bill miraba toda la escena con su ojo entrecerrado
- Que tramas, estimado? - se creaba un eco eterno que sonaba por toda la dimension en la cual se encontraba Bill, "floto" por el lugar mientras pensaba y trataba de idear un plan, algo maquiavelico, algo excepsional, algo increible, imposible de superar, pero... Nada aparecia en esa mente infinita, como detener a este erudito, que seria la posible piedra en el zapato de Bill, el se mantenia totalmente hipnotizado por todas esas posibles ideas, pero que solo resultaban en caos, hasta que sintio como era llamado nuevamente por Stanford, esta vez se sintio emocionado, toda esa tension entre "sixer" y nuestro "erudito" lo mantenia algo interesado en como se encaminarian las cosas, Bill aparecio frente a Stanford como siempre, pero esta vez como un chico rubio bastante alto, piel clara, ojos cafes, pero con un extraño toque dorado, vestido elegantemente de dorado, y su distintivo sombrero y baston, al aparecer saco su sombrero en forma de saludo
- Como te va, cerebrito?! - su voz sonaba como siempre y ese tipico encanto en sus palabras resonaba en toda la sala, tenia su sonrisa de lado, pero desaparecio cuando noto otra presencia, miro a un lado y vio al chico de lentes y bata blanca mirarlo detenidamente
- Y tu eres...
- Yo soy el...
- Por supuesto que si! - aparecio a su lado y rodeo con los brazos a ambos jovenes - nosotros somos quienes vamos a cambiar al mundo! - miro a ambos chicos y luego los solto y camino hacia al frente, podia leer los pensamientos de ambos
"Ya es hora de trabajar, tengo tantas preguntas! Espero que Bill pueda responderlas"
- "Stanford sigue ignorante" - penso Bill al momento en que se formaba una sonrisa amplia
" No, debes confiar en el, puede que utilice halagos falsos para conseguir mi confianza, debo mantenerme despierto y siempre atento a cada cosa que haga "
En momento la sonrisa que tan bien acompañaba a Bill desaparecio, se dio una media vuelta y elevo la pizarra y la movio para que quedara frente a ellos, Stanford se acerco un poco mas para admirar el dibujo, pero al mirar atras vio a su compañero totalmente sorprendio
- Hey! Que pasa? - la voz de Stanford tenia un cierto grado de humor, algo poco usual por parte de el
- Acaba de mover eso telepaticamente - afirmo para si mismo, le temblaban las manos ¿acaso habia sido un truco de magia? No! Imposible, el jamas habia creido en la magia, todo tenia una solucion cientifica, todo se podia comprobar a traves de alguna respuesta quimica o fisica y nada podria contradecirle eso
- Wow relajate, amigo - Bill se acerco a el con las manos al frente, la telepatia es una de mis variadas cualidades, y para que sepas no todo se puede resolver de forma quimica o fisica, no, por lo menos en mi dimesion - dijo entre risas, el joven solo toco su cabeza con una mirada llena de horror y nevios - Si, puedo leer mentes tambien, solo soy honesto - le entrego una sonrisa y luego se dio vuelta para terminar el dibujo, el miro el suelo desconsertado, se acerco poco a poco y miro la pizarra para escuchar las palabras de Bill.
Durante la noche, luego que Bill hubiera terminado de dar las instrucciones de como lograr activar aquel portal el se acosto para tratar de dormir, pero todo se lo impedia, sus pensamientos, sus emociones, e incluso el ruido de su reloj de mano le era insoportable, todo ruido le era insoportable y todo silencio le era aterrador, giro varias veces en su cama hasta que sus ojos lo obligaron a dormir.
Stanford por otra parte estaba en una de sus jugadas de ajedrez tridimencional nuevamente, y como todas las noches perdia contra Bill quien ya se encontraba acostumbrado a la victoria
- me ha parecido alguien interesante - se limito a decir Bill mientras movia una de las piezas con algo de fuerza, hablar sobre el, le era desagradable, pero debia mostrarse agradable ante todo el mundo
- Si, el es un genio, por eso yo lo llame, para que ayudara - sono algo feliz al nombrarlo, esto causo cierta molestia en Bill, quien se consideraba el unico genio en todo el universo
- Pero no vi que hubiera ayudado demaciado - sono despreciativo ante aquel comentario - es mas creo que decirle genio es demaciado para el - Cada vez hacia mas fuerza para posar la pieza en aquel tablero, Stanford fruncio el ceño y lo miro con desagrado
- En verdad el fue de mucha ayuda, tanto cientifica como emocional, sin su ayuda yo ya hubiera estado al borde de la locura, es mas lo estuve, pero gracias a su presencia pude no caer en ella - su voz sono mas "golpeada" y elevada que antes, siempre se mostraba sumiso ante Bill, ya que le tenia total respeto y devocion, pero tambien le tenia mucho cariño a su compañero el cual habia sido un gran soporte para el, Bill trato de no mirarlo, pero cada vez sentia como su interior ardia ¿que clase de sentimiento es ese? Era la gran pregunta de Bill, para el todo aquel que no ayudara en lo que se suponia que era su especialidad era un pobre incompetente, sabia que esta pequeña discusion subiria de tono y lo peor seria que el mismo saldria de su papel
- Yo lo veo como un obstaculo, claro muy buen soporte fue, pero el era quien ponia barreras a todo, y si lo piensas bien, yo estoy aca ahora y si estoy aca es para ayudarte, ¿de que te sirve el, si yo estoy aca ahora? - Bill en todo ese tiempo no habia quitado la mano de aquella pieza, el agarre que tenia a ella era lo que lo mantenia controlado y en cierto modo tranquilo, pero todo acabo cuando sintio que Stanford se levantaba de su asiento
- Gracias a el tu estas aqui, por que cuando estaba apunto de quebrarme algo en la cabeza el me dio la idea de caminar por el bosque...
- por favor vuelve a tu asiento...
- Sin la ayuda de el, tu todavia...
- Ahora
- Estarias sin hacer nada en tu dimension, gracias a el tu no estas encerrado en tu dimension, por que nadie mas te ha llamado y podria apostar que has estado asi en años
- Sientate! - Bill golpeo la mesa rompiendo el tablero y la pieza que hasta ahora habia sido su soporte temperamental
- No! - grito con fuerza mientras apretaba sus puños y lo miraba al ojo, pero en ese momento algo lo obligo a despertar. Al abrir los ojos se encontro con Bill frente a el, en su forma humana, pero ya no era rubio, su cabello estaba totalmente rojo al igual que su traje
- Nadie me desobedece! - su voz sono mas grave al mismo tiempo que sujetaba con fuerza ambas muñecas de Stanford con tal fuerza que logro soltar varios quejidos de aquel chico - Y quienes lo hacen son castigados! - en ese momento variados dibujos aparecieron en sus ojos causando un terror descontrolado en Stanford mientras que la sonrisa de Bill crecia y se acercaba mas al rostro de aquel joven.