LLEGÓ ESE DÍA...

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Y llega un día en el que conoces a una persona por la que vale la pena cada sonrisa que le dedicas.

Por la que vale la pena soportar la distancia.

Te dice esas cosas que ilumina tus ojos y, de repente, te has enamorado.

Le entregas todo de ti, lo mejor y lo peor pero de manera única, sientes que es esa persona y no otra.

Te tiras un largo tiempo compartiendo su camino.

Un día te deja por otra, solo por tema sexo.

Todo tu mundo se apaga y aunque sabes que ya no te merece sigues queriendo que vuelva y olvide el sexo.

Quieres que prefiera todos los momentos que compartisteis juntos, incluso los peores.

Tu mente sabe que no debes desear eso porque si volviera solo te haría daño

Te tiras el tiempo en un tira y afloja hasta que terminas aflojando y le dejas a la vida arrasarte.

Justo cuando estas a punto de caer aparece otra persona que vuelve a iluminar tu camino.

Es un misterio.

Esa persona te habla y tú solo sonríes como una idiota y te dejas llevar por ese sentimiento otra vez.

Te das cuenta de que él es diferente, que él te entiende más que nada.

No lo dices por cumplir, sino porque él es el ex novio de la nueva novia de tu ex novio.

A él también le dejaron por el mismo tema, y a pesar de los impedimentos le dejas que cale en tu alma.

Le dejas que entre en ti y aunque se lleve lo mejor de lo que te queda no importa.

En un momento te da miedo, un miedo horrible a que te deje, y estas con una soga, una que aprieta y no ahoga.

Cuando más liberada te sientes dejas tu cuerpo disfrutar y la soga aprieta de nuevo.

Te das cuenta de que él no es tan perfecto como parecía y bajas de esas nubes que solo provocan tormentas en tu juicio.

Te habla y te acuerdas de porque fue él el que te ayudo a salir de todo en lo que habías caído.

Estas otra vez en un tira y afloja...

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