-¿Realmente quieres morir?- preguntó dólido su padre en cuanto la vió llegar
-Ya hablamos de esto antes- La chica dejó las llaves en su lugar
-Sólo hablaste tú- Atacó su progenitor
-Papá, dejemos este tema ya- rodó los ojos
-Sabes que si tu mueres automáticamente muero yo, no me refiero a que mi corazón deje de latir, hay distintas formas de morir en está vida- su padre suspiró sonoramente.
-Papá...
-Sabes cuando tu madre murió una parte de mi murió también dejándome incompleto,a medias, y si lo único que me hace sentir vivo muere yo...
-Pa'- a la chica se le quebró la voz.
-Valentina tu lo eres todo para mí
-Estoy sintiendo cosas por <<el chico del parque>>- gritó- Y no quiero, me niego a sentirlas-negó con la cabeza- Yo simplemente no puedo, suficiente es con el dolor que causo en ti-la castaña tragó en seco- No quiero causar más daño-se le escapó una lágrima
-No deberiamos de negar algo que sale del corazón-sonrió comprensivo
-El corazón se equivoca demasiado
-No puedes hablar del amor si no lo haz sentido
-Puedes hablar si han roto tu corazón-Sonrió amargamente- O haz roto alguno.
-Valentina
-Papá, tú y yo sabemos algo, lo sabemos y aunque lo niegues pasará, es cáncer, una enfermedad mortal.
-Estas tomando medicina
-No puedes hacer que no pase algo que el destino ya planeó- dijó y se dió la vuelta
-El destino se equivoca.
-No papá- suspiró- somos nosotros en nuestro tonto afán de cambiar algo que nos equivocamos. El destino no se equivoca. Los que nos equivocamos somos nosotros.
-¿Vas a aceptar algo así y ya?. ¿No harás nada para que cambie lo que la vida ya planeo para ti?.
-¿Qué puedo hacer?- sonrió melancólicamente- Te diré la respuesta: Nada, no puedo hacer nada.
-¿Se acabo y ya?. ¿No vas ni siquiera a intentarlo?.
-No puedo intentar algo cuando el tiempo me está matando. Cada minuto, cada segundo que paso aquí me está matando, estoy muriendo, y ni tú, ni Axel, ni las medicinas mucho menos yo podemos evitar que suceda.
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La Chica De La Trenza Marron
RomanceValentina era sin duda la descripción perfecta de "daño". Y aunque toda ella indicaba que iba a lastimarme, aún así me acerque, y me quede hasta que se decidiera a lastimarme, pero no lo hizo, sólo me miró y decidió marcharse. No podía verla. Y a de...