El Øtro día

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No me gusta los días nublados, aunque de mala suerte me tocó en el primer día de clases, me molesta ser "nuevo", no todos se toman en serio la llegada de una persona en esa prisión.
Me hospedo en un departamento viejo, no es muy lujoso, es como dormir en el bosque pero sin árboles y tierra solo el olor antiguo de las paredes aunque prefiero el olor húmedo después de llover. Suelo tener ropa abrigada oscura, no quiero creerme emo solo no me gusta mostrarme al mundo, para mí esta es una manera de revelar mi rostro.

Fui directo al colegio y como toda persona desconocida de la clase busque donde sentarme.
Quise estar al frente pero un chico, de estatura más alta que la mía paso empujándome llevándose el lugar en el que deseaba sentarme, después de mirar a cada estudiante encontré un puesto llamativo, único en su clase, me gustaba su apariencia algo descuidada y parecida a él, solitario, antisocial y algo inútil. Algo dentro de mí me decía que tenía que ir.
No dude en sentarme, mis compañeros me miraron de manera muy extraña. "Ahora yo soy el monstruo?" Pensé, escuche susurros de las chicas viendo lo sexy que me veía, me dio un escalofrío molesto, el maestro llego con el director, me pidieron que pase al frente para presentarme.

Mi voz sonó entre cortada en ese momento.
-Mi nombre es Jean Raymond.- dije.
Algunos comenzaron a reírse en voz baja y otros solo susurraron junto a sus caras serias. El profesor con una voz muy gruesa me dijo:
-Muy bien, algo que quieras mencionar?.- dijo.
Mi mente se puso en blanco...
-Me temo que no.-
No paraban de reírse los desgraciados y los susurros se volvían abundantes.
-Bueno, alguien desea compartir su asiento con Jean.-
Todos quedaron en silencio, ignorantes, cuando una chica alzó la mano otra intervino.
-Yo.-
-Yo también.-
-Alce la mano primero.-
La pregunta era inútil yo ya tenía mi propio puesto.
-Perdone, pero yo ya tengo donde sentarme.-
-Enserio?, y dígame cuál es?.- dijo de manera desafiante.-
Mis compañeros se reían en silencio esperando a que le diga algo estúpido.
Señale aquel puesto muy llamativo y antiguo, pero mi respuesta no era aceptable para el.
-No, no puedes sentarte ahí.- dijo.
-Por qué no?.-
-Solo no puedes, tus compañeras compartirán puesto contigo hasta que consigan una banca para ti.-
Aún así no estaba de acuerdo con su petición.
-Me gusta, como algo tan maravilloso no puede ser tan aceptable.-
Su rostro infligía rareza y algo de miedo, me dirigí al puesto y sentándome pase mis manos en el dándome un sentimiento de amor y extrañes. Solo decidió ignorarme y comenzar su clase.

Todo fue aburrido; al cabo que ni quería venir, prefería quedarme en casa comiendo fideos instantáneos mientras veía televisión, salí de clases para ir a receso cuando 2 chicas se reían en los casilleros, una de ellas me dijo:
-Adiós guapo.- riéndose.-
Me sentí extraña, pues lo que ellas no sabían es que yo era mujer.

Al día siguiente volví al colegio, pero antes compre unas flores rojas

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Al día siguiente volví al colegio, pero antes compre unas flores rojas.
Entre a la clase y me senté en mi puesto mientras acariciaba los pétalos rojos, los chicos me miraban de manera detestable. Una chica se acercó y me dijo:
-Wow que lindo detalle, es para mi?.-
Trató de tomarlas pero yo las aparte guardándolas bajo mi pupitre.
-Lo siento pero estas rosas no te pertenecen.- dije.-
- refunfuña.-
Fue directamente a su puesto enojada y algo deprimida, creo que no tuve que decirle eso.

Una profesora entro a la clase y se presentó, sino recuerdo se llamaba Katherine. Parecía muy inteligente, aunque fue una lástima que tenga un cerebro de nuez ya que solo nos manda a leer y resolver ejercicios del mismísimo libro, eso me hizo pensar que nunca me debo dejar llevar de las apariencias, como el lo hizo, terminando en un hoyo de oscuridad. Después de la clase fui al bar por una botella de agua, me senté en un banco apartado.

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Mi barco de ilusiones comenzaba a zarpar, tú eras mi capitán y yo tu comandante, los mares eran tranquilos y tiernos, oía el suave golpe del agua al barco, las velas se izaron y fuimos directo al mundo de los sueños. Mientras cruzábamos la lluvia de ideas, me decías "vamos a lo más profundo de los sueños, ataquemos a las pesadillas y busquemos la felicidad", yo tomé tu mano y nos juntamos en una aventura, ese sistema fue interrumpido, aplastados y echo cenizas.

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Mi concentración se esfumó:
-Hola.- dijo una chica de manera atrayente.-
Otra chica?, ya eh tenido suficiente con estas, a parte de que una pensó que le regalaría un ramo de rosas.
-Perdón, te conozco?.- dije.
-No, pero yo sí. Me llamo Amber, soy de la clase de al lado.- dijo.
-Y?.-
-Eres muy cortante como para ser un chico.-
Otra imbecil que piensa que soy hombre, esta es la razón por la que no me junto con gente.
-Por qué tomas solo agua, no tienes hambre?.- dijo.
-No.-
Mira por un momento mi vestimenta y pregunta:
-Por qué usas Buso?.-
-Tengo frío.- respondí.
-De que?, hace calor.-
-Haz visto un cuerpo muerto?.-
-Si, eso que tiene que ver?.-
-Pues, es raro pero es como si tuviera a alguien muerto dentro.-
-...-
Nos quedamos en unos segundos de silencio y ella se rió.
-Eres gracioso.- dijo mientras trataba de parar su risa.
De todas las personas de este lugar solo una se atrevió a hablarme, me sentí feliz pero a la vez acosada, y lo peor es que era por una mujer.
Ella cambio de tema.
-Oye, tú conoces a Clancy Raymond
Que si lo conozco? Es mi hermano, bueno, lo era, hasta que falleció.
-No.- respondí.-
-Que bueno, por un momento pensé que eras familiar de ese asesino.-
El no era ningún asesino, nadie se tomó ni un momento de su tiempo para conocerlo.
-Por qué?.-
-Ya sabes, por tu nombre.-Jean Raymond.-
Esta chica me está dando miedo, no creo confiar en esta farsante acosadora.
-Y eso que tiene que ver?.-
-Mucho, no has escuchado de la leyenda de Clancy?-.
-No-.
-Bueno, se dice que él era un psicópata con problemas de la cabeza, un día trato de asesinar a su profesor e incendiar el patio de comida, cuando lo atraparon y lo rodearon el mismo se lanzó al pozo del jardín trasero y dijo que volvería para vengarse, no como un fantasma, sino como una persona desde ese día su familia se mudó y cambiaron su apellido para ocultar aquel incidente. Los testigos dicen que vieron el espíritu de el en los pasillos del instituto, cuando unos estudiantes revisaron el anuario encontraron a una persona que dijeron que sería su hermano o hermana pero el problema era que no había una foto de el o ella, desde ese entonces se pensó que esa persona volvería para cumplir el testamento de su hermano, y....-.
Mis ojos estaban cristalinos, mis mejillas rojas, una lluvia de pena inundó mis ventanas de visión. Comencé a sollozar.
-Eso es mentira!!!.- grite.-
La gente nos quedo mirando mientras le tomaba de la blusa mirándola furiosamente.
-El nunca quiso lastimar a nadie, el solo quería ser amado pero ustedes...-
Estaba asustada, con los ojos perdidos, confundida y perpetrada por mi reacción.
-Ustedes lo mataron, USTEDES SON LOS VERDADEROS ASESINOS!!!!.-
Le di un leve empujón y salí corriendo, mientras trataba de secar mis lágrimas empujando a la gente para que me deje pasar.

💀 Si les gusto regálenme una Estrellita, comenten que les pareció, si esto llega más de 5 estrellas subiré el segundo capítulo. No olviden seguirme para ver más detalles de esto y más obras por hacer.
Soy Finny y les deseo unas dulces pesadillas. 👻

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⏰ Última actualización: Oct 09, 2016 ⏰

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