Ella estaba rota.
Ella no sabia como escapar del mundo absurdo qué la rodeaba.
Ella se sentia sola, ella no tenía a nadie en quien confiar, nadie en quien creer. Ella quería morir.
Ella sentia qué los cortes eran su «salvación» su unica salida.
Ella lloraba todas las noches, ella quería desaparecer.
Ella fingía estar bien.
Ella creía qué era el fin, qué su vida no valía nada. Ella no tenía algo por lo qué luchar. Ella tenía miedo, ella estaba asustada.
Ella creía qué nadie la aceptaría tal cual era.
Ella se sentia cómo una vez me senti yo.
Pero el destino se hizo presente, las cartas se movieron, la jugada cambió.
Llegué a su mundo con un solo propósito, sanar su vida, sanarla a ella, no dejar qué muriera.
Ella lo entendió, ella supo desde qué llegue, qué era la unica que entendía lo qué estaba pasando.
Ella sabia qué yo era real, como lo era ella, como lo era ese instante.
Ella mejoró, ella cambio.
Ella tiene una razón para sonreír y algo por qué luchar y esa soy yo.
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Lo que escribo cuando estoy rota
RandomCada palabra que está escrita aquí, es únicamente mía. Palabras amargas o dulces, van dirigidas a una sola persona. Aunque hay veces en las que solo son mías, no van dedicadas a nadie, simplemente es lo que siento. Son las cosas que guardo, de la...