- Cora-san soy un adulto, no voy a ir. - estaba sentado en el asiento junto a Cora-san, no pienso ir a ese sitio, aunque ya estaba yendo. - Estoy acabando la carrera de medicina y sé que no necesito esto.
- Eres un adulto al que han tenido que expulsar de una clase en la universidad de medicina por clavar un lápiz a un compañero por haberte saludado. ¿Porque un lápiz?
- Tch... - me giré hacia la ventanilla del coche, ese tío se había acercado demasiado a mí, y si no había entendido mis miradas de "aléjate o te mato" no era mi problema.
- Mira Law, nunca me he metido con tu vida social, eres alguien que no tiene muchos amigos, y no me meto con eso, pero de ahí a atacar a la gente que te saluda...- paró porque el semáforo estaba en rojo, le dio una calada a su cigarrillo y me miró. - si vas a ser un buen médico entenderás que esto es por tu bien, además, yo llevé aquí a mi hermano después de todo lo que pasó y ahora es otra persona.
- ¿Hablas de tu hermano? ¿El que se pasa el día con una sonrisa psicópata y una risa malvada? - dije mientras nos poníamos otra vez en marcha.
- ¿Lo preferías como era antes?
- No lo prefería ni antes ni ahora.
- Ese no es el tema Law...además, si tanto odias ese sitio entonces haz amigos cuanto antes y ya no tendrás que volver. - después de girar una esquina nos detuvimos en frente de un edificio que tenia como letrero: Centro de Reintegración en la Sociedad. No habría bajado de no ser porque Corazón me empujó fuera del coche, yo subí las escaleras y antes de entrar miré una última vez a Cora-san, él me sonreía de una manera muy estúpida.
- Sabes que no me voy a ir hasta que no te vea en esa habitación de ahí. me dijo señalando una ventana del edificio y sin borrar esa estúpida sonrisa.
Yo suspiré y entré al edificio, sé que Cora-san sería capaz de obligarme a entrar a la fuerza, y no quería llamar la atención. Una vez dentro vi a una chica pelinaranja y de ojos marrones sentada detrás de un escritorio, me dirigí hacia ella para preguntarle que tenía que hacer, pero ella se levantó de golpe y me dirigió una mirada asesina.
- ¡¿Se puede saber que haces aquí?! - dijo mientras se levantaba. - ¡No pienso devolver nada de lo que has pagado si no haces la hora entera!
- Es la primera vez que vengo aquí, y yo no he pagado nada. - dije con indiferencia. - Me llamo Trafalgar Law y estoy aquí porque Donquixote Rocinante me apuntó.
La chica miró su ordenador unos segundos y luego se volvió hacia mí.
- Tercera puerta a la izquierda, y no vuelvas a llegar tarde! Cuando acabes vente un momento y te daré tus horarios. Por cierto, me llamo Nami.
"Esta chica no es normal." Pensé y me dirigí hacia donde me había indicado, me paré delante de la puerta y dudé sobre si abrirla o no, al final la abrí, y en ese mismo instante me arrepentí de mi decisión. La habitación era grande, pero parecía pequeña a causa de todo el desorden, sin contar que estaba repleta de personas incivilizadas corriendo y gritando. Iba a darme la vuelta y volver por donde había venido, pero un chico moreno, con el pelo recogido en una coleta y una nariz muy larga me cogió del abrigo.
-¡Hola! ¿Eres el nuevo? - me dijo sonriendo, yo asentí y él tiró de mí y me llevó hasta el centro de la habitación.
- ¡Escuchadme todos! - dijo levantando la voz, y los presentes se detuvieron y pararon atención, todos menos un chico peliverde que estaba durmiendo. - ¡¡Zoro!! - gritó el narizotas.
- ¿Eh...? - respondió el otro aún medio dormido.
- Bien, - se giró hacia mí. - me llamo Usopp, soy estudiante de segundo año de Ingeniería Industrial, en mi tiempo libre me gusta jugar a videojuegos y quedar con mis amigos. ¿Y tú?
ESTÁS LEYENDO
Centro de Reintegración en la Sociedad (Lawlu)
FanfictionTrafalgar D. Water Law es un joven que está en el último año de la carrera de medicina, y no es muy sociable que se diga...pero un día su tutor, Cora-san, decide llevarlo a un centro de reintegración en la sociedad donde Law conocerá a alguien muy m...