Las gotas de lluvia se escurrían por la ventana del vehículo en movimiento, el paisaje se volvía una sombra gris que pasaba desapercibida, íbamos a una gran velocidad, pero aun así quedaba mucho camino por delante, aunque realmente no quería llegar.
-Oye...¿Sabes que acabo de recordar?-hablo Taehyung en mi oído mientras apoyaba su peso en mi hombro-cuando cumpliste catorce años y me contaste aquello por lo que estabas confundido, cuando Jimin te había dado el mejor regalo-pude sentir como sonrió levemente, contagiándome a mi.
-Cierto, ya lo recuerdo(...)
Hoy cumplía catorce años y había decidido hacer mi primera fiesta, los últimos años había comenzado a ser mas abierto y ahora tenia mas amigos, así que hoy vendrían a festejar conmigo.Seria una fiesta normal, baile, comida, bebida, y regalos, aunque el regalo que esperaba mas ansioso era el de mi hyung Jimini.
Acabe con los botones de mi camisa negra observándome frente al espejo, un gran suspiro se escapo de mi garganta, no solo mi cuerpo tenia nervios por la fiesta, si no que especialmente para el evento había organizado el juego "Siete minutos en el cielo", así tendría de manera asegura que esa noche daría mi primer beso, sonaba desesperado, pero se sentía triste ser el único que no había tenido el gusto de aquella experiencia.
Ya estábamos a la mitad de la fiesta, todos estaban bailando, papá y mamá habían decidido no hacer parecencia ese día, darme mi espacio como adolescente que comenzaba a ser.
La música se detuvo y todos nos colocamos en una ronda, mientras aquella botella de plástico vacía comenzaba a dar vueltas, buscando aquel momento en el cual parar de manera aleatoria y mandar a dos personas al armario mas cercano.
Parecía que aquel recipiente me odiaba, pero a Jimin lo amaba, oh claro que si, pasaban dos parejas y en la tercera Jimin volvía a pasar, y cuando salia de aquel armario llevaba marcas de labial tanto por su cuello como por su rostro, de alguna manera me causaba un sentimiento de repulsión y enojo.
-¡Jungkook y Jin So!-estaba tan concentrado en mi aburrimiento, que no me había dado de tres puntos importantes en ese momento.
1-La botella apuntaba en mi dirección y la de una chica.
2-La chica era totalmente hermosa.
3-Jimin parecía enfadado(...)
-Pararemos un rato, ocurrió un accidente en la ruta, duerman si quieren, les avisare cuando lleguemos-aviso el conductor observándonos por el retrovisor.
Odiaba los accidentes en todos los sentidos, por culpa de ellos, lo había perdido.
Cerré los ojos para abstenerme a saber los detalles.
"Jimini... ¿Por qué no vuelves?..."
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