Denso [aratake]

1.

N/A: Esto lo escribí deprisa y corriendo porque estaba de mala leche pero me ha convencido un poco así que lo dejo aquí. Lo hice un medio AU idk

La vista desde lo alto de la noria era hermosa. Tal vez una atracción de feria no otorgaba la seguridad(mucho menos para un experto mecánico como él) de una construcción hecha con el propósito de observar el paisaje, pero al menos daba lo que ofrecía: Sacudidas de vez en cuando y una vista fantástica de la ciudad. Sin embargo, al mirar a su acompañante, se dio cuenta de que era el único que estaba disfrutando de ver los edificios (que tampoco había mucho más que ver) bajo sus pies. Frunció el ceño, una expresión que variaba entre la curiosidad y la preocupación, tal vez incluso aderezada con un poco de molestia porque habían quedado y tenía la cabeza en otra parte, pero las dos primeras terminaban por opacar a la última.

-Arata -Le llamó con voz suave,provocando un respingo en el pelirrojo y una fuerte sacudida en la cabina. Tragó saliva, rezando por evitar lo que podía ser una muerte demasiado prematura, y esperó a que su pobre corazón se calmase antes de volver a hablar- ¿Te encuentras bien?

-¡Sí, perfectamente! -Como para demostrarlo, asintió con fuerza, mostrando así el exceso de energía acumulada que formaba los nervios en Arata. Lo conocía ya lo suficiente como para saber cuando mentía, aunque tampoco había que ser un experto en el pelirrojo como para reconocer las señales, era más transparente que una ventana, una de las cosas que le gustaban de él.

-Bueno...Pero si te pasa algo dímelo.

Arata volvió a asentir, una especie de ansiedad delatándose a si misma en su expresión. Con los ojos todavía fijos en este, se preguntó si era consciente de lo dolorosamente obvio que llegaba a ser, como sabía que ocurría algo incluso si no se lo había dicho y como sabía que estaba mintiendo incluso si las piezas no encajaban para explicar por qué. Aunque,suponía, si era algo que debiese saber, lo sabría.

-¡Ta-Takeru! -A pesar de que era obvio que le estaba haciendo caso, Arata intentó llamar su atención, el rostro encendido con un adorable tono de rojo. El mecánico no era tonto, al contrario de hecho, que se le considerase un genio en un campo no quería decir que no supiese más del resto de cosas, así que, en cuanto vio la vergüenza aparecer, no tuvo que pensar demasiado para darse cuenta de lo que iba a ocurrir- Ha-Ha-¡Hay algo que quiero decIRte!

El rubio asintió, intentando reprimir una risa ante el gallo que se le había escapado, si Arata no era una de las cosas más adorables que había visto en su vida, podía decirn o haber visto ninguna en absoluto.

-Pues que llevamos mucho tiempo siendo amigos y...-Pudo oír como tragaba saliva, sus ojos fijos en las manos, bien juntas sobre su regazo, perdiéndose la sombra de rojo que también teñía las mejillas de Takeru- pues que quería saber sí.. .¡Si quieres salir conmigo!

-Sabes que llevo casi un año ligando contigo, ¿Cierto? -Habló tras unos segundos de silencio, sus labios curvándose en una suave sonrisa.

La expresión de sorpresa de Arata sustituyó pronto a su vergüenza, provocando que la risa que el mecánico había aguantado antes, saliese con fuerza, no haciendo más que alimentar el tono que coloreaba al muchacho.

-Pues podrías habérmelo dicho...

Arata tenía suerte de que Takeru encontrase sus despistes tan adorables.