"Siempre ha sido así y siempre será igual, que el tiempo y el mundo, el dinero y el poder, pertenecen a los mediocres y superficiales, y a los otros, a los verdaderos hombres, no les pertenece nada. Nada más que la muerte..."
Der Steppenwolf - Hermann Hesse[Omsk - Siberia: 17 de Junio, 22:17]
Tic...Tac...Tic... Tac... Y el reloj continúa girando, milésimas van, segundos pasan volando y eternos minutos no se sienten; es entonces cuando Sergey Petrov solamente soltó un ligero gruñido de nerviosismo ante la mirada ansiosa del otro adulto que le acompañaba, sosteniendo con fuerza aquel trozo de tela que en su momento había sido blanquecino, el mayor dirigió su mirada al joven que ahora yacía recostado sobre una de las sillas, ese mismo al que se le podía ver luchar por tomar una bocanada de aire en medio de espesa saliva carmesí "Venga niño...Tienes que soportar un poco mas..." dijo el antiguo agente de la KGB al mismo tiempo que hablaba con un tono conciliador para tan joven varón; este mismo que dejó un por unas milésimas su vista del chico, dirigiéndose a su inseguro compañero en el instante que le escuchó hablar "¿De verdad crees que lo logre?" aquel cuestionamiento quedó en el aire cargado de incertidumbre, el más viejo observó a quien le acompañaba para suspirar y volver a dirigir su mirada al menor apretando un poco mas la húmeda tela escarlata pese a los casi mudos quejidos de este "Se que lo hará...Aunque no lo parezca este chiquillo es resistente" intentó sonar convencido de sus propias palabras pese a que una herida como aquella no fuera algo de lo que cualquier persona pudiera recuperarse, pero aunque el panorama no lucía tan alentador algo en su intuición le animaba a no perder el entusiasmo "Además la pequeña Katerina me mataría si le pasara algo a este muchacho"
Y fue para el asombro de los presentes (incluso una exclamación de asombro se pudo escuchar del conductor) que un inesperado agarre en el brazo del viejo miembro de la KGB le hizo dar un ligero respingo, solo para ser testigo de cómo su mirada se cruzaba en aquel momento con unos enturbiados orbes de cobalto "S...Suave...E...esto...D...duele" y pese a que fuera casi un murmullo ahogado la voz del joven mercenario se hizo escuchar poco antes de que tratara de moverse y un par de groserías escaparan por sus labios, al igual que dos líneas carmesí que descendieron por sus comisuras; ante aquella acción el más viejo de los presentes tuvo que sostener al más chico con un agarre firme a la par que trataba de tranquilizar al chico que comenzaba a verse visiblemente aterrado "Joder niño...Se que estás asustado pero necesito que te quedes quieto" aquella voz severa logró que el pequeño varón permaneciera en su lugar mientras jadeaba con fuerza y se mordía el labio en un intento por no quejarse "Kolia..." y ante aquel diminutivo por el que pocas veces le llamaban el chico con cabellos de noche enfocó débilmente sus atenciones en este, luchando por mantenerse despierto pese a que la inconsciencia iba y venía de forma intermitente "Kolia... de verdad se que ya estoy pidiendo demasiado al exigirte que permanezcas despierto...Pero necesito pedirte un favor" asintió como pudo tratando de que esa voz permaneciera un poco mas dentro de sus pensamientos, tan solo inclinó la cabeza en cuanto espesa saliva sanguinolenta le impedía entrar aire a sus pulmones "Pequeño necesito saber algo...¿Hay alguien que deba saber de esto?..." la pregunta pareció quedar en el aire, los adultos se miraron entre sí consternados, quizá aquel pequeño niño no fuera soportar mas que algunos minutos; fue un sorpresivo murmullo lo que les trajo de vuelta al mundo real:
-En el móvil...Liosha...Llámenlo...Por favor...- Notorios jadeos de su parte, diminutos gimoteos se escucharon; la mano del mayor de todos terminó acariciando algunas hebras de ébano en un intento de dar consuelo.
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Ohne Dich
Short Story-Bienaventurados quienes claman sus plegarias a los cielos...Pues para ellos los favores de los ángeles existirán Bienaventurados las almas de gloria...Pues las mieles del gozo serán suyas Bienaventurados quienes se sobreponen a las lagrimas...Pues...