Capítulo 18.

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No sé cuanto tiempo llevo con la cara entre mis brazos y llorando. El suficiente para que ya no me quede ni una sola lágrima en el cuerpo, veo el estropicio del salón y me da igual, volvemos al principio, a estar mal por alguien del sexo contrario. Sabía que no debía fiarme de un estupido universitario, y lo peor es que se lo conté todo, le conté todo lo que llevo dentro, abriendome a él. Miro la hora, las cinco de la tarde. Zayn sigue durmiendo, me arrastro hacia él esquivando algunos trozos de porcelana y le cojo la mano.

-Te necesito...necesito a mi mejor amigo...- Le susurro jugando con sus dedos y examinando cada detalle de su mano. Él mueve uno de ellos y veo que ha abierto los ojos, los mios se llenan de lágrimas casi al segundo. Le abrazo más fuerte que nunca.

-Ey pequeña, estoy aqui, estaré siempre aqui...-Su voz se funde en mi pelo, y mis lágrimas ahogan su respiración.

-No me dejes, no te dejo que te vuelvas a separar de mi, Zayn.- Le digo sollozando. Y en ese estúpido segundo, dejo de ser yo, para ser una estatua, alguien sin sentimientos, porque mi corazón se ha roto muchas veces y ha estado pegado más de una, pero en esta ocasión sé que no valdrá ni el más fuerte de los adesivos. Sé que estoy perdida en mi misma. Dejo de hablar, de llorar, de mirar a un punto determinado, esta noche, me lo permito, no ser humana, no tener sentimientos...

Noto como Zayn me zarandea al no escuchar ninguna silaba salir de mi boca.

-No...Lucía, no vuelvas a hacerlo.- Noto como se sacude el pelo y me mira desesperado, ya me había visto así antes. Me roza la mejilla con su calida mano y me coge en brazos. Sube al piso de arriba conmigo y me tumba en la cama, va hacia el baño y abre la bañera llenandola de agua caliente, el vapor sale del cuartito y noto como Zayn me lleva hasta él. Me pone frente al espejo y me quita suavemente la ropa, no me incomoda, practicamente no pienso en ello, él sabe como soy, física y mentalmente, me ha bañado otras veces, es mi mejor amigo, como mi hermano. Las prendas van cayendo sobre un cesto pequeño, él me vuelve a coger en brazos y me mete en la bañera, el agua caliente roza mi cuerpo y mis labios se humedecen con el vapor. Zayn roza mi hombro con suavidad y me recoge el pelo en un moño, roza con su mano mis labios, cierro los ojos y de uno de ellos cae una lágrima, me hundo más en la bañera y él se sienta en un taburete a mi lado, le cojo la mano y la acaricio entre mis dedos, él me mira. Noto algo diferente en sus ojos, no sabría que es, pero decido ignorarlo.-Lucía...¿Puedo...?

Le miro y se me forma un gran nudo en la garganta, asiento, como en los viejos tiempos. Aparto la mirada mientras él se pone de pie y se va quitando la ropa. Cuando termina noto que se mete en la bañera, encojo las piernas y me las abrazo para tener mas espacio, el agua sube de nivel con el cuerpo de Zayn y él suelta un suspiro. Noto que me coge de la mano y tira de mi hacia él, me sienta entre sus piernas y me abraza por atrás, besa mi nuca y yo suspiro. Juego con el agua que nos rodea y noto los labios de Zayn por mi cuello.

-Te quiero...- Me susurra, y mi piel se pone de gallina, pero no por su respiración rozandome el cuello, y es que no sé que significa aquel 'Te quiero'.

Un paso hacia adelante, dos hacía atrás. (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora