Ale esta confundida, se siente sola cada momento de su vida. ¿Su madre? No es la mejor madre del mundo, y no quiere aceptar que le duele la partida de su esposo ¿Su hermano? Sólo la fastidia, es menor que ella pero no soporta sus estúpidas bromas ¿...
Sabia que era Alex, volteé hacia la puerta igual que Fer, me acerque para abrirla
-Ni se te ocurra- me dijo Fer en un susurro, su cara y su forma de decírmelo me dio tanto miedo que retrocedí, el timbre volvió a sonar y esta vez Fer fue hacia la puerta y la abrió -¿QUE?- le gritaba a Alex.
-Vengo por Ale- pero mi hermano no se movió, sabia que esto no iba a resultar bien -Digo seria mas fácil si te quitaras o le hablaras- Alex intentaba ser cortes y que no lo sacara de sus casillas.
-No esta, que lastima- Fer intento cerrar la puerta pero Alex puso su pie para detenerlo, yo empuje a Fer y salí por la puerta y la cerré.
-Corre- me susurro Alex al oido, entonces empecé a correr lo más rápido que pude y Alex atrás de mi, yo sabía que Fer no nos seguiría pero le daba emoción al asunto. Por fin paramos en el parque donde todo había ocurrido, era mi parque preferido desde ese momento tan perfecto. Me acerque a Alex y le di un beso
-Con tanta emoción ya no te pude saludar- El me sonrió y me abrazo, si soy sincera esperaba algo mas, no se un beso en la frente aunque sea -Oye te noto súper raro- tenía que decírselo, me chocaba quedarme callada respecto a algo que me incomodaba.
-No, perdona es que no he tenido una buena semana pero no es tu culpa- se froto el cabello con la mano y luego tomo mi mano -Ven tengo muchas sorpresas para ti hoy- empezó a caminar y fui atrás de el, cuando por fin estábamos al mismo paso me jalo de la cintura y me atrajo hacia el yo le rodeé sus hombros con mi brazo y seguimos caminando. Mi relación era tan perfecta que me pellizcaba para estar segura de que no era un sueño, pero si es un sueño por favor aun no me despierten. Hacia 3 años que no era tan feliz como ahora.
Después de caminar muchos minutos llegamos a un lugar civilizado, era sorprendente el cambio tan drástico, pues hace un tiempo estábamos en un lugar tan solitario y escalofriante y ahora en una plaza con tanta gente, autos y edificios, era bastante confuso, pero era lo que menos me importaba en ese momento. Volteé a ver a Alex el me sonrió se detuvo y me cargo como costal de papas, yo no pude controlar la risa
-bájame- le dije entre pequeñas risas mientras lo golpeaba con mis manos y pataleaba -Eres un tonto- la risa aumentaba con mayor velocidad, el no dejaba de caminar, entonces se detuvo de golpe me bajo e inmediatamente me empujo hacia la fuente que estaba atrás de mi, el agua salía de un lado de una manera muy peculiar y hermosa. Me levante mientras los chorros de agua me caían -Pero que maldito- entonces lo jalé del brazo aunque obviamente mi fuerza no se comparaba con la suya, ni si quiera lo pude mover, así que me salí lo intenté empujar hasta que me cargo por la cintura, giro y me aventó a la fuente pero yo fui mas rápida, lo jale de la mano y cayo junto conmigo luego tome agua y se la aventé, empezamos a jugar, la fuente era lo bastante grande para correr en ella. Era demasiado divertido, los dos reíamos y jugábamos sin importar como la gente nos miraba. Me sentía tan bien, era tan perfecto, me encantaba que de igual manera que yo no le afectaba en lo mas mínimo lo que dijeran los demás, fue en ese momento en el que me enamore aun mas de él, por fin corrí hacia él y lo abrace pero era una trampa y lo tire. Hasta el momento era tan divertido, claro si quitamos la pequeña discusión con mi hermano este día era de lo más perfecto...
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