Volver a vivir

Capítulo 5

Al momento de escoger las habitaciones para cada uno, ya todos sabemos con quien vamos a ir, ya que los grupos se dividen según la amistad y el tiempo que llevamos conociéndonos. Para mi caso me toca con Mateo, Martín y Francisco. Son una compañía muy grata y ya llevamos años compartiendo las historias juntos.
Que verga- grita Martín cuando entra al baño
¿Qué paso?- le pregunto asegurándome de que él está bien
No hay agua en esta puta habitación- nos informa
Ya era de esperarse, nunca tenemos residencias decentes y con todos los servicios básicos que un deportista debe tener.
No hay problema amigo- dice Mateo con un tono tranquilidad
Está bien- responde Martin con una cara de enfado
Las horas pasan y no tenemos nada que hacer, mis compañeros están sentados en su cama usando su teléfono celular para hablar con las mujeres que igual viajaron conmigo y para mi mala suerte mi pequeño aparato telefónico no sirve y tengo ganas de hablar con Valeria.
Valeria es una chica que conocí hace ya dos años, nuestra historia es muy confusa la verdad. Yo solía ser el típico ser humano sin sentimientos que juega con las mujeres hasta sacar lo mejor de ellas y dejarlas tiradas en cualquier lado. Pero con ella fue diferente, la razón es que sí, inicio como una apuesta entre Marco y yo. Pero después ella se convirtió en algo muy especial para mi y a pesar de las peleas que siempre teníamos, en la noche ya nos poníamos bien.
Estamos juntos ahora mismo pero no he sabido nada de ella en dos días enteros y lo cierto es que me preocupa mucho, ya que es típico de nosotros hablar por mensajes de texto todo el día, pero lo más hermoso es que conforme nos conocemos más y más tenemos muchas cosas en común, aunque quisiera tener muchas más pero me conformo con las que tengo.
Por fin vale mi celular y decido pues llamarla sin pensar dos veces en lo que va a pasar después de esta decisión.
El teléfono empieza a sonar pero ella me cuelga en el segundo tono. Desesperado por saber que le pasa sigo insistiendo y Valeria sigue colgando su puto celular.
Sé que pasa algo grave, lo sé siempre cuando ella no me responde, pero tengo la certeza de que lo nuestro va a terminar en algunos días. Desde pequeño siempre he tenido presentimientos y en esta ocasión no será la excepción.