WALKERS | Daryl Dixon

6: " Sola e inútil "

Estoy furiosa. Muy furiosa.

¿Quien se cree Lori que es para andar metiéndose en cosas que no le incumben? Está claro que le gusta Shane, todos nos hemos dado cuenta de esto, pero al menos podría intentar disimularlo por Rick.

Cuando llego a la granja voy directa al cuarto de la familia Grimes.

Cuando abro la puerta de golpe ambos me miran. Sí, ambos, para mi suerte Rick también está.

-¿Que cojones te crees que haces? -escupo con rabia mirando a Lori- No te metas en mi vida. -le advierto.

Ella sonríe, claramente ha captado de que hablo.

-Solo le dije a Daryl lo que ví, tiene que saber con quien anda. -me mira sonriendo.

Rick está callado, escuchando todo. Se ve que no sabe de que va la cosa.

-Oh, ¿te gusta que la gente sepa con quien anda? Entonces supongo que estarás de acuerdo con contarle a tu marido con quien anda él, ¿no? -me mira alarmada- Rick, dile a tu mujer que deje de ponerse celosa cada vez que ando con Shane. Y que aunque todos sabemos que le gusta, deje de ser tan evidente, que ya cansa. -Rick me mira con estupefacción.

Y sin decir más, salgo de la habitación.

Subo a la torre de la granja y me dedico a mirar a la nada.

Estoy harta de que todo me salga mal. Estoy harta de todo y de todos.

Lágrimas salen sin cesar. Me siento sola e inútil. Echo de menos a Merle, a mi familia, a mis amigos...

Oigo como abren la puerta de la torre, pero siquiera miro para ver de quien se trata.

-Mi niña, ¿te encuentras bien? -pregunta Carol abrazándome.

Yo me derrumbo en sus brazos. Y cuando mi llanto cesa decido hablar.

-Nada está bien. -se separa para mirarme.

-¿Que ocurre? -pregunta preocupada.
-Estoy sola. Todos tenéis a alguien aquí, alguien por el quien luchar o seguir. Pero yo estoy sola, siquiera se porque sigo. -digo con sinceridad.

Hacía tiempo que me sentía así. Veía a todos con familiares o amigos que ya conocían y yo me sentía, de cierto modo, 'desplazada'.

-No estás sola. Me tienes a mi, y tienes al resto también. Somos una familia, nos importas y te queremos. -río.

-Carol, estoy segura de que si hubiese un ataque de una horda ahora mismo, cada uno iría a salvar su culo y el de los suyos, nadie movería un dedo por salvarme. -ella niega.

-Estás muy equivocada, apuesto a que todos, incluyéndome, iríamos a por ti. -me agarra de la mano- Eres mi niña, eres junto con mi pequeña Sophia, lo más preciado que tengo. -la abrazo con fuerza.

-Gracias. -susurro.

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-Vamos a ir a por provisiones. -me dice T-dog.

-¿Quienes? -pregunto.

-Glenn, Rick y yo. ¿Te apuntas? -dice y asiento.

-Cuenta con ello.

Cuando Rick y Glenn bajan, nos subimos a la camioneta y salimos en dirección al supermercado.

El camino es silencioso, y las miradas de Rick en mi hacen que aparte de silencioso sea incómodo también para mi.

Al llegar y ver el panorama que hay nos ponemos alerta.