Cap.1
Volví a mirarme en el espejo por última vez, si no me daba prisa llegaría tarde al primer día de clases. Estiré un poco la falda de mi uniforme hacia abajo, quitando así las pequeñas arrugas que se habían formado en ella, y me aflojé un poco más el nudo de la maldita corbata azul.
-Lista… - susurré para mi misma mientras me echaba mi larga cabellera oscura sobre un hombro y me colgaba la pesada mochila con el escudo del colegio en el otro.
Bajé rápidamente las escaleras, llegando en pocos segundos al gran recibidor de la casa, en el que divisé la rubia cabellera de Hannah moviéndose de un lado para otro de la sala impacientemente.
-_________!! – gritó con una mueca de alivio- vámonos o llegaremos tarde. – Y cogiendo al vuelo su mochila salió como un rayo por la gran puerta de la casa.
Aunque ya llevaba en aquel lujoso alojamiento desde hacía dos semanas, todavía le impresionaban aquellas grandes puertas de madera de la entrada principal.
Comenzamos a andar a paso ligero en dirección al instituto Brooks, el centro de enseñanza más prestigioso y caro de toda Inglaterra, no podía creerme como había cambiado mi vida en apenas dos semanas. Había pasado de vivir en una humilde casa en España, yendo a un instituto público y sin prestigio alguno, a pasar a vivir en una mansión impresionante del centro de Londres, rodeada de lujos y de todos sus caprichos, y todo gracias a Hannah, que sería de mi sin ella? Nunca podré agradecerle lo suficiente que me haya acogido en su casa y que me esté dando esta gran oportunidad, aunque solo vaya a estar aquí tres meses, estoy segura de que el haber pasado un tiempo en el instituto Brooks va a repercutir muy positivamente en mi currículum.
Hannah me sacó de mis pensamientos con un codazo, al que yo reaccioné dando un pequeño salto del susto.
-Ahí está – dijo ella señalando el gran edificio que teníamos justo enfrente. Era precioso, había que admitirlo, y estaba rodeado por hierba y bonitos árboles por todas partes.
-Es muy bonito – dije absorta por el gran tamaño del mismo.
-Tranquila, en unas semanas acabarás odiándolo tanto como yo – Dijo risueña Hannah- Anda vamos, te enseñaré tu taquilla.
Respiré profundamente y agarrando fuertemente el asa de mi mochila, entramos al hormiguero de pasillos que era el instituto Brooks.
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Hannah me había enseñado mi taquilla y me había explicado cómo llegar a la cafetería donde quedaríamos a la hora del almuerzo, y ahora me encontraba vagando por los pasillos sin saber dónde ir, todos los alumnos ya estaban en sus respectivas clases, pero yo necesitaba rellenar los papeles que todos los nuevos alumnos deben rellenar, pero no tenía ni la más remota idea de cómo llegar a secretaría.
Vi a una señora mayor cargada de papeles cruzar por delante de mí a unos escasos 10 metros, y salí corriendo en su dirección para que me informara cómo llegar. Unos pocos pasos antes de llegar a la señora, algo o mejor dicho alguien choca contra mí y me tira al suelo bruscamente. Me quedo un poco desconcertada en el suelo, veo como la mujer se aleja sin apenas inmutarse por mi caída y me sobresalto al ver una mano justo frente a mi cara, tendida para ayudarme a levantarme.
-Lo siento guapa, iba distraído y no te he visto- Dijo el chico con voz dulce.
Acepto la mano que el desconocido me ofrece sin apenas mirarle a la cara por la vergüenza del momento, y una vez en pie de nuevo, me dispongo a salir de allí cuanto antes.
-No te preocupes, yo tampoco presté mucha atención- Recogí mi mochila del suelo en un rápido movimiento y empecé a dar largos pasos por el pasillo, sin saber dónde ir exactamente.
Fue entonces cuando noto que alguien me agarra el antebrazo y me gira para quedarse frente a mí.
-Soy Niall, Niall Horan- dice aquel muchacho hasta entonces desconocido para mí.
