Capítulo 22 de mi patética existencia

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- Hola

Con un movimiento de cabeza me hizo entender que me había oido, pero no se digno a mirarme.

En realidad no sabía porque al descubrir que era él había decidido seguirle hasta aquel callejón. Me pase la mano por el pelo incómoda. ¿Había dejado a Itziar sola en la tienda de discos y había perseguido a Sky por todo el centro comercial para que ahora no se dignase ni a mirarme? NO, me negaba a dejarlo asi.

- No voy a pedirte explicaciones per....

- Me alegro de que tu madre este mejor- dijo sobresaltándome.

¿Como sabría él...? Bueno ese no era el punto.

- Gracias pero no m...

- ¡Mira Helena tenía que volver no importa por que pero tenía que hacerlo, tengo que prot...cuidar de mi familia, me han pedido que haga algo que no quiero hacer y estoy echo un maldito lio, te agradecería que me dejases en paz y te volvieses por donde has venido!

- No- él me miró interrogante- No pienso dejar esto asi- me acerqué mas a donde él estaba sentado.- Dime que te pasa.

Al parecer mi pregunta le dejo algo descolocado, no se la esperaba. Me miró de arriba a abajo y se encogió de hombros.

- No puedo

- Y ¿Se puede saber por qué?

- Porque tu estas implicada en ello.

Le miré con los ojos como platos y noté como un escalofrío me recorría la espina dorsal.

- B- bien, entonces estas obligado a contarme de que se trata- respondí tartamudeando irremediablemente, intentando parecer tranquila.

- No si no quiero

- ¡Oh vamos Sky! Ya me has dicho muchas cosas, ¿que tan malo podría ser?

El soltó una risa amarga, fue entonces cuando noté que estaba raro, preocupado quizás o triste por algo. Sin saber muy bien porque los músculos de mis brazos se tensaron y apreté los puños.

Sky sacó una mano de su sudadera y se apartó el flequillo. De repente se levantó de donde estaba sentado haciéndome dar un pequeño bote por el repentino movimiento. Sacó la otra mano de su sudadera y lo que llevaba presionado contra sus  dedos hizo que se me secase la garganta.

Dicen que contra el miedo hay dos reacciones posibles, paralizarse o correr, yo sentí como mi cuerpo reaccionaba a la primera.

- Maldita sea Helena- no me había dado cuenta de que Sky había estado hablandome, con la boca abierta aparte mis ojos del arma y los fije en los suyos, cansados, inertes, pero con un cierto fondo preocupado y espectante.- ¿Por qué no puedes mantener la boca cerrada?

Al ver que yo no respondía Sky avanzo peligrosamente hacia mi y algo en mi cerebro hizo click obligándome a comenzar a retroceder como si estuviésemos haciendo un extraño baile.

- Tu no lo entiendes ¿verdad? Bueno, supongo que ya no hacen falta explicaciones. Necesito proteger a mi familia, y eres la única forma de poder librarme de esto

"¿su familia? ¿Que tenía que ver su familia con esto?"

No era capaz de pensar en nada coherente. Sky seguía acercándose a mi y yo no fui capaz de dar un paso más y me paré en seco, Sky también paró, pero no dejo de apuntarme con la pistola.

- Lo siento Helena, no esperaba que todo acabase asi

- No tiene por que acabar ahora- me sorprendí a mi misma. La voz me había salido temblorosa y chillona.

- Si, si quiero proteger a mi familia.

Mi cara se contorsionó, esto iba en serio. La piernas comenzaron a temblarme y note como mi cuerpo entero vibraba por la ansiedad.  El terror mas puro que jamás había sentido se apoderó de mi.

- Adiós- murmuró antes de erguirse y levantar el arma directa a mi estómago.

Oí el ensordecedor disparo. Mi cuerpo se inclinó hacia atrás y tuve que apoyar la pierna para no caerme.

Escasos segundos después noté el frío acero perforando mi piel poco a poco. Bajé la cabeza mientras empezaba a sentir el punzante dolor y con horror observe como mi vieja sudadera comenzaba a teñirse de rojo, un rojo que avanzaba demasiado rápido por todo el tejido. Levanté la vista y le vi, vi sus ojos preocupados, que ya no eran fríos sobre mi, vi como aún sostenía el arma apuntándome y vi como temblaba, un temblor mucho más escalofriante que el mío. Seguí con el rabillo del ojo la dirección de su mirada que se había desplazado a su derecha y vi a tres hombres mirándole con una sonrisa en el rostro, Sky asintió y volvió a mirarme. Corrió hacia mi y antes de que cayese al suelo consiguió posar suavemente sus brazos bajo mi espalda.

"Cliché"- pensé, aunque mi voz sonaba apagada en mi cabeza.

- Nada es lo que parece- le oí susurrar en mi oido- 19 ocho bolera.

Y caí al suelo, el dolor me consumía por dentro, notaba como si estuviesen quemándome poco a poco con una antorcha. Los hombres del tejado habían desaparecido, Sky había desaparecido....pero no tardó
en llegar hasta mi nublada vista un rostro desconocido con gorra de policía. Oí mi respiración entrecortada retumbar en el fondo de mis pulmones. Todo parecía ir a cámara lenta. El hombre cogió un altavoz de su cinturón y gritó algo, estaba nervioso. Le ví agacharse y mover las manos en mis ojos y llevarlas hacia mis oídos pero yo no oía nada. Parpadeé lentamente, no quería que se cerrasen pero no parecía tener voz en este momento. Por suerte conseguí volver a abrirlos justo a tiempo de ver como el chico posaba sus brazos bajo mi espalda y me levantaba. El dolor se hizo insoportable, todo volvió a su velocidad normal y no pude evitar ahogar un espeluznante grito de dolor. Dejé de ver y caía en un sueño profundo, oí a lo lejos el sonido de una ambulancia, pensé en mi madre, pensé en Itziar, y por último pensé en él y no se por qué sonreí, le recordé en su casa, con mis pantalones en sus manos, su cara de bobo acercándose a mi mientras sujetaba mi barbilla, diciéndome que me quería y noté aquel beso que nunca llego. Supongo que las historias de amor no existen, ni las peliculas...y lo sentí por mi madre y por It y por JJ, porque me iba y no iba a poder despedirme. Sentí un peso en mi pecho y dejé de respirar, supe que había llegado, una lágrima resbaló por mi mejilla.

"19 ocho bolera"- pensé y algo en mi, pequeño y casi inexistente vibro, la esperanza....

¿¡Me van a dejar escribir!?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora