Todo comenzó el 24 de Diciembre...
- ¡Leila, Nick, bajen que ya llegaron nuestros invitados! -grita mi madre desde la puerta principal.
- ¡Ya vamos! -dijimos ambos.
Bajamos corriendo las escaleras para ir a saludar a todos y yo esperaba que entre esa multitud estuviese mi padre, el cual se había ido a comprar unas bebidas. Al bajar, Nick me empuja haciendo que cayera al suelo.
Nick siempre me trata así de mal, ya que soy la menor, él tiene 10 años y yo 7.
Mi madre salió corriendo a ayudarme y regañó a Nick, pero como era navidad no lo castigó.- Nick, quiero que te disculpes con tu hermana. -le dijo en un tono suave, pero serio a la vez.
- Lo siento Leila... -me dijo entre dientes.
- No pasa nada, no te preocupes. -dije tratando de parecer alegre.
Mi madre llamó a todos al comedor para empezar a cenar, pero yo me dí cuenta de algo...
- Mami, ¿dónde está papá? -pregunté un poco preocupada.
- No lo sé, cielo, ya debería haber llegado. -dijo igual de preocupada.
En eso suena el celular de mi madre y contesta, pero después de decir hola se queda callada, todos comenzaron a preguntarle qué le pasaba y mi madre dice...
- Nick, Leila, vayan a sus habitaciones... -dijo un poco débil y sin voz.
- Mamá, ¿qué pasa? -pregunté un poco preocupada.
- ¡Sólo vayan a sus habitaciones! -dijo gritando.
Eso hicimos, fuimos a nuestras habitaciones y estuve despierta todo la noche, no podía dormir, tenía mucha curiosidad de saber lo que había pasado. Me dormí eso de las 2 a.m., pero mi curiosidad aumentaba, yo sólo esperaba que no fuera nada relacionado con mi padre, que aún no había regresado de hacer esa compra tan sencilla.
A la mañana siguiente me levanté antes que mi hermano y bajé por las escaleras, me encontré a mi madre todavía en el comedor mirando hacia la nada, me acerqué despacio y le pregunté...- Mami, ¿qué sucede? -pregunté un poco triste al ver a mi madre tan deprimida.
Ella sólo me miró y me abrazó largándose a llorar en mi hombro, en el hombro de una niña y yo no comprendía lo que pasaba, mi hermano se despierta poco después que yo y abrazaba a nuestra madre. Fui a buscar un vaso con agua, al agarrarlo nos dijo...
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Los Cambios siempre existieron
Teen FictionLeila es una chica, que por culpa de los problemas con su familia, llegó al punto de auto lesionarse. Su madre era muy dura con ella y su hermano la trataba como una basura. Ella ya no tenía vuelta atrás, pero una persona llega y hace que todo lo qu...