7-Okons

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Corrimos hasta la zona del ataque, a la que los Okons tendrían más acceso, el mismo lugar por el que entramos, la zona de aterrizaje.
Llegamos y nos encontramos con unos soldados atrincherados detrás de las compuertas apuntando hacia éstas para disparar cuando los Okons intentasen abrirse paso. En ellos se veía miedo.
Inicié comunicación con Ma-Ko y con D.I.O para estar al tanto de lo que sucedía en cada conjunto.

  —Ma, informa.—ordené.
—Por el momento cero peligro para los civiles,—explico.—acabamos de reunir soldados para cubrir la zona de refugio, aun falta mucha gente por entrar pero creo que nos dará suficiente tiempo.
—De acuerdo. D.I.O, situación.
—Lo mismo que Ma-Ko, no hay problema, pero a lo mejor posteriormente afecte a la nave de manera grave.
—Concrétame ese "posteriormente". Dime exactamente cuándo afectará gravemente a la nave.
—Pues...
—¿D.I.O?
—Han sucedido varios daños en el motor de la nave y... en realidad, no tardará mucho en iniciar una explosión interna que acabará en algo incluso peor, la explosión del resto de la nave.
—Oh, mierda. D.I.O, intenta comunica...

Un golpe fuerte en las compuertas me interrumpió e hizo que los soldados, aun muy nerviosos, apuntasen hacia éstas. Yo cargué mis armas y apunté al igual que el resto. Emma se dirigió hacia la zona de los francotiradores. Cuando llegó...

—¡ESTÁN DENTRO!—la voz de Emma resonaba por todos los pasillos cercanos. Entonces me comuniqué con ella.
—¡¿EMMA?! ¿Donde coño estás?
—Lez, tenéis que salir de ahí. Los Okons están dentro, han matado a los francotiradores. Llegué y encontré un enorme charco de sangre de los soldados, entre los cadáveres un pequeño grupo de Okons, he salido de ahí, pero me están siguiendo.
—De acuerdo.—entendí y corté la comunicación con Emma. Entonces advertí a los soldados.—¡Rápido, hay que irse de aquí, los Oko...!

Las compuertas salieron volando retorciéndose en el aire y aplastando a unos cuantos soldados. La sangre de éstos salpicó por toda la zona. Todos empezaron a disparar mientras nos retirábamos de ahí. Los Okons no se quedaban parados, también nos atacaban y con mayor ventaja, nuestros soldados caían rápidamente, los suyos a una velocidad completamente inferior.
Me di cuenta de que Emma salía por un pasillo, me miró y salió corriendo hacia otra dirección con intención de desviarlos y darnos ventaja, no fue así. Los Okons que seguían a Emma se desviaron hacia nosotros por lo que tuvimos que escapar.
  Los Okons era muy rápidos, mucho más rápidos que un Usain Bolt tres veces, lo cual reducía rápidamente el número de soldados.

  —Ma-Ko, date prisa, estamos dirigiéndonos hacia allí.
  —¿Pero qué...? Lez, no están todos evacuados.
  —¡Pues evacuadlos de una vez!
  —Lez, esto no se puede hacer rápido, si metemos prisa a la gente cundirá el pánico.
  —¡MA-KO!
  —¡ATENCIÓN! ¡Deben darse prisa, los Okons se dirigen a esta zona!—gritó a la gente y luego se dirigió a mí.—¿Contento? Ahora todos están atemorizados.

  Se oían los gritos de las personas a través del comunicador de mi brazo. Nos acercábamos a la zona central, donde estaban Ma-Ko, Selek y Thomas. Pensé en cerrar las compuertas de la zona cuando estuviésemos más cerca pero que nos diese suficiente tiempo para pasar. El problema es que aquello requeriría otro gran número de sacrificios. Le ordené a D.I.O, controladora de la nave, para que ejecutase mi idea.

  —¡CORRED!—ordené con intención de que se salvasen más soldados.
  —Señor,—un soldado cercano se dirigió a mi sin dejar de correr.—podemos hacer una distracción.
  —¿De qué hablas? Vamos a salir todos de esta.
  —Señor, quiero hacerlo por el bien del resto.

  Yo no pude rechazar aquella petición, podría darnos una pequeña ventaja. El soldado se dio media vuelta, ordenó a otros que hiciesen lo mismo y se dispusieron a disparar, sólo a unos pocos metros de las puertas. Cogimos mucha ventaja, tanta que pude pararme para dar media vuelta e ir a por ese soldado sin ser asesinado. Le agarré y le saqué de allí mientras los otros soldados nos seguían. Entonces las puertas habían bajado más de la mitad. Teníamos que ir lo más rápido posible. Quedaba cada vez menos. Y qué mejor idea que montarnos un Indiana Jones. Logramos salir de ahí pero un gran número de soldados...

Regreso (objetivo la tierra #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora