Era el primer día de clases, ya era el segundo año desde que Yayo ingreso a esa escuela, básicamente era su tercer semestre. El solo pensar que Yayo volvería haber a sus compañeros así que le diera un poco de frustración y nostalgia.
-Hay están mis idiotas favoritos- Pensaba Yayo mientras los saludaba muy sutil mente.
La verdad es que a Yayo no le agradaba nadie, era el típico adolescente amargado, listo y antisocial.
-Hey Yayo, como estuvieron tus vacaciones?- Preguntaba Bryan, el era algo así como su mejor amigo, se llevaban muy bien porque ambos saben de cómic y esas cosas.
-Mejor que la cara de tu hermana-
-Jajajaja no te mames Yayo-
-Y tu que has echo de tu vida Alexis?-
-Jugue Legue of Legends todas las vacaciones-
-Y yo pensé que el antisocial era yo- Se burlaba Yayo de Alex como siempre.
La verdad es que para Yayo todo era igual, nada cambiaba, sus mismo compañeros igual de estúpidos, los mismos maestros estrictos, las mismas personas en su camino, toda la mierda era igual que siempre, la misma. Creo que lo único que cambiaba era su salón.
El los honores Yayo se percato de algo, había una niña con corte un poco diferente, o mas bien, casi no tenia cabello, Yayo no quiso despagar la mirada de hay, pero tenia otras cosas en que pensar.
Cuando dieron las 9:45 sus amigos pensaba en solo una cosas: Nalgas. Si, eran las niñas de nuevo ingreso a quien querían ver, como Yayo estaba tan aburrido el decidió ir a acompañarlos.
-Hey Yayo, apúrate!- Gritaba Bryan como si ver nalgas fuera importante.
-Adelántense ustedes, en un momento los alcanzo- Como joden estos sujetos, eso era lo único que pensaba en aquel momento.
Al llegar a al salón de hospitalidad se percato que todos sus compañeros ya se iban.
-¿Que? ¿A donde van?-
-No había nada interesante-
-Echare un vistazo-
Hay fue cuando Yayo la vio, ella tenia un cabello muy corto, pero a la vez muy hermoso, era ondulado como las curvas de una nube, su piel era color canela, sus ojos grandes, grandes como las canicas que el usaba para jugar cuando era niño pero a la vez eran como un abismo enorme. -No dudaría en estar hay si me lo permitiera ella- Yayo había visto algo tan bello, que para el no podía describir tal chica.
-Yayo, que estas viendo?-
-Nada-
-Pues vámonos hijue puta-
Yayo no podía sacar a esa niña de su cabeza, ella era tan bella, en ese momento el arte dejo de tener sentido comparado con aquella mirada de esa dulce chica.
Pero nadie podía saberlo, nadie tenia que saber que a el le gustaba una chica, el era reconocido por su frialdad, sarcasmo y sobre todo, por ser el chico mas serio de la escuela. Era su sonrisa disfrazada de frialdad lo que lo reconocía como un maldito.
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Yayo ama a Jaws
Teen FictionEsta es la primera vez que Yayo vio a alguien que no supo que tendría gran importancia en su vida.