© Resurrección de los divergentes

4.Matrimonio

Tris

-¿Recuerdas la ultima vez que vimos el cielo real y no el patio artificial?-me pregunto Uriah metido totalmente en sus pensamientos mientras miraba por la ventana.

-Parece que fue hace una vida. Jamás me había parecido tan hermosos como hoy.-dije más para mi misma que para él.

-Me muero de ganas por ver a Zeke y a mi madre. Creí que nunca volvería a verlos, es casi un milagro. Asumo que tu quieres buscar a Tobías.

-No voy a negarlo, he esperado tres años para verlo y no puedo con la emoción.¿Qué harás tu James?

-Comenzar de cero.-eso era lo que todos queríamos... Comenzar de cero.

Vi el departamento de genética mientras James conducía en una total oscuridad. Me preguntaba si acaso David estaba allí, y si me recordaba. Si recordaba el amor que decía sentir por mi madre. Me pregunto si el amor de Tobías aun me recuerda.

-Estamos muy cerca y tengo que decirles que no podremos usar nuestros verdaderos nombres. Si nos buscan aquí, será fácil encontrar nuestro nombre. Piensen en algo.

-Yo me llamaré Keiynan Lonsdale.

-¿por qué ese nombre?-pregunte confusa por pensarlo tan rápido.

-Es un chico que conocí cuando probaron mi suero....Murió-dijo luego de una larga pausa. Yo había presenciado tres veces la muerte provocada por uno de mis sueros, sabia los nombres de cada uno de esos chicos, pero me negaba a recordarlos, me negaba a hacerme daño.

-¿Cómo te llamarás James? ¿Ya lo pensaste?-pregunto Uriah directamente.

-Seré Alaric Ross, era él nombre de mi padre y apellido original de mi madre. ¿Tu Tris?

-Yo... Creo que no sé, no quiero usar el nombre de mis padres, todos los conocían.

-Shailene.-dijo James de pronto.

-¿Disculpa?-le pregunte extrañada.

-Era mi antigua novia, ella era muy parecida a ti en muchos aspectos.

-Shailene, no suena nada mal, hermano.-dijo Uriah golpeando juguetonamente el hombro de James.

-¿Qué paso con ella?-dije antes de poder detener mi boca.

-Ella... Ella...ella se presento voluntaria para un suero divergente que como es obvio, no funciono.-su cara se contrajo un poco con gesto de dolor, pero solo fue un momento, como si tratase de ocultar sus sentimientos.

-¿Y mi apellido?

-James, nadie sospechará que usas mi nombre como apellido.-dijo James mirando al frente, directo al camino.

-Shailene James, suena bien.-Uriah me miro extrañado por el espejo retrovisor, y luego volvió su mirada al frente.

La gran valla, apenas y la reconozco, parece que hace una eternidad desde que cruce aquella puerta. Ahora hay un pequeño cubículo en la entrada y de hay sale un hombre vestido de negro con una linterna en mano, se acerca al auto y apunta la luz de uno en uno hasta volver a James.

-¿De dónde vienen?-dijo el hombre.

-Somos de la periferia, venimos a buscar asilo en Chicago.-respondió James con voz fuerte y firme, casi como si lo hubiese estado ensayando.

-Bajen del vehículo por favor.-los tres seguimos su indicación y salimos del auto, me sudaban las manos y mi corazón estaba desenfrenado.-Ahora siganme.

Lo seguimos hasta el cubículo y hay nos pidió nuestros nombres, los cuales registro en el computador.

-¿Saben si son divergentes o si pertenecen a alguna facción?-pregunto el hombre mientras me miraba fijamente.