PROMETISTE NO IRTE

CAPÍTULO 5: EL MEJOR LUGAR..

ESTA CHICA SERA DAYSI

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Había pasado ya una semana desde el enfrentamiento que tuve con los chicos, las chicas me aconsejaron no ir a la escuela durante esa semana y David se quedó todo ese día conmigo, estudiamos, lo invite a comer y vimos películas. La verdad lo había pasado muy bien con él y por un momento había olvidado el mal momento que había vivido con los chicos.

No podía continuar con esto, no había visto a las chicas desde ese día y las echaba de menos así que ya iba siendo momento de volver a verlos y enfrentar lo que pasara.

-¿En qué piensas Renny?- me miraba fijamente David, mientras yo picoteaba mi comida, improvise rápidamente y lo primero que se me ocurrió preguntar fue por los demás alumnos.

- Ya pasaron 3 semanas y los demás alumnos, los de segundo y tercer año no han aparecido- dije tratando de hacerle creer que era eso en lo que pensaba, en cierta forma era verdad y quería que el creyera lo que estaba diciendo ya que no quería tocar el tema de mis amigos con él. Ya había lidiado conmigo toda esa tarde, no quería agobiarlo más -¿No deberían estar ya ellos tomando clase?- David sonrió ante mi pregunta y al parecer me había perdido ya de algo.

-Ellos ya están aquí, llegaron hoy- me miraba fijamente como si estuviera por contarme algún secreto- Hay una tradición, se supone que los alumnos de segundo y tercer año suelen hacer actividades juntos, se van a acampadas y suelen formar un lazo de amistad fuerte entre ambas generaciones. El viaje de verano es lo que todos esperan, se van ambas generaciones de viaje 3 meses, antes de que los tercero cursen su último año.-

-Vaya, si que suena muy bien esa tradición- dije sorprendida- Entonces antes del ciclo escolar se van a disfrutar de la vida.-dije sonriéndole

-Exacto, suele hacerse antes de iniciar el curso, ya que cuando los de tercero concluyen el año andas más ocupados buscando universidad y trasladándose a sus nuevos destinos, que pensando en fiestas o cosas que los distraiga.-dijo sonriéndome.

-Tiene lógica-lo miro mientras pico mi fruta, la verdad es que no tengo mucha hambre pero no quiero que David se preocupe porque no estoy comiendo.

La cafetería empezaba a llenarse más de lo normal y por lo que pude escuchar eran los chicos de los otros grados, estaban en reunión en el auditorio, ya empezaban a hacerse presentes. De pronto mi mirada se centró en un chico cabello castaño, ojos azules y tez blanca, tenía una sonrisa muy bonita, su mirada era intensa y ambos no dejábamos de mirarnos. Era extraño, fue como si nuestras miradas quisieran encontrarse, pero toda mi atención se desvió hacia una chica rubia que se acercaba hacia nosotros con una enorme sonrisa.

-¡David!, mi vida, te eche tanto de menos- esta confesión me hizo salir de todos los pensamientos que tenía, ella se abalanzo en mi guapo amigo y lo beso como si no tuviera fin. Me sentí tan extraña, incluso vi las miradas incomprendidas de los amigos de David- No me volveré a ir sin ti, lo prometo mi amor- aun resonaba su voz chillona. MI DIOS, DAVID TENIA NOVIA.

-Hola Daysi- la voz de David era de asombro, como si no creyera lo que acababa de pasar- Yo... necesito procesar todo esto- dijo separando a la chica de sus brazos, lo cual vi que a ella le enfado.

-¿Qué no te da alegría de que este aquí?-pregunto Daysi un poco enojada

-Es que tu... no lo puedo creer- mi amigo estaba entrando en shock y me asustaba un poco

-David- lo llame tomando su mano, por fin la chica volteo a mí y creo que en ese momento se dio cuenta que existía- ¿Estas bien?- le pregunte preocupada, la mirada asesina que tenía la chica hacia mí la sentía, pero la ignore porque me preocupaba más David que los berrinchitos que ella tenía.