5 minutos

¿Cuantos son 5 minutos?

Hola. Si, estoy hablándote a ti. Si, a ti, lector. Solo te voy a pedir 5 minutos de tiempo, nada más. Estos cinco minutos quizá no sean muy productivos, o quien sabe, puede que si. Creo que sean productivos o no no te va a llevar un mundo. No vas a estar leyendo una historia de una hora o algo así. No, solo son cinco minutos de tu vida. 

La vida es larga y al mismo tiempo es corta ¿no crees? Piénsalo. Yo cuando era un poco más pequeña e iba al colegio los días normales se me pasaban rápido porque era estudiosa. Sin embargo, cuando era época de exámenes por mucho que se me diese bien estudiar eses días se me hacían largos, y no veía la hora de estar jugando con mi consola y dejar de estudiar. Todo depende de como nos sintamos, ¿no? Eso también pasa con esos cinco minutos de los que te voy a hablar. Seguramente, mientras haces algo y alguno de tus padres te dice por ejemplo (o te decía): ¡A dormir! Tu, seguramente le dirías algo como ¡Ya voy mamá/papá! Bueno, o abuelo, abuela, tío, tía, tutor/ora... Vamos, el que cuidase de ti cuando te decían eso (a lo mejor aún te lo dicen ahora XD). Bueno, a lo que iba. Eses cinco minutos que pides, a veces (y en mi caso la mayoría) se pueden volver hasta media hora. Si, media hora. O incluso los más despistados una hora o más. Seguramente pensareis que eso es mucho (o no), pero no es tanto. Otras veces, por ejemplo, estás a punto de salir, y tienes que arreglar una cosa antes. En ese momento, tus padres, tutor o amigo con el que estés te dirá algo como: ¡Vámonos rápido! Y tu contestarás algo como: ¡Sí, cinco minutos! Por lo menos en mi caso yo tardo como dos minutos como mucho. Por lo menos yo creo que es porque estoy pensando es que tengo que irme.

Veis que según tu momento las cosas cambian ¿no? Por eso para mi el tiempo es muy abstracto. Bueno, en realidad no se puede ni ver ni tocar ni nada, así que igualmente es algo abstracto. A lo que me refiero con eso es que puede pasar un año volando o más lento que las tortugas. ¿Y tu? ¿Para ti normalmente las cosas van lentas o rápidas? Piénsalo mientras vas bajando y si lo tienes claro ponlo en los comentarios.

Bueno. ¿Pensaste algo? Si es así, ya sabes donde ponerlo. Si no, no pasa nada. Yo soy muy indecisa, así que no culpo a nadie por eso. 

Ahora que vuelvo a leer el texto, me doy de cuenta de que hablo como si fuera hace como 20 años que me pasaron los ejemplos. ¡Qué tengo entre 11 y 14 años, por Dios! XD Serán cosas mias ¿no? Quizá sean eses cinco minutos que se han alargado como años en mi mente. Enserio, eso pasa. A mi bastante. Tengo que ser sincera, la verdad es que soy muy despistada.

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¿Sabéis que se tarda más tiempo en leer diálogos? Por eso voy a inventar una historia dentro de esta historia sobre los cinco minutos.

"Había una vez un hombre que iba muy apurado. Su única familia era su mujer y su hermano. Siempre iba con prisas y no dejaba ni a su mujer ni a su hermano descansar un rato. Un día su mujer le preguntó:

-¿Se puede saber por qué siempre haces todo con prisas?

-Porque si no no aprovecho bien la vida.-contestó él

-Si vas corriendo por la vida no vas a poder disfrutar lo que hay en ella.-dijo ella con sabiduría- Si vas tan rápido, ¿de que te sirve vivir si no disfrutas? Te pierdes todo porque no te paras a caminar. Siempre vas a coger el metro o el bus y nunca te paras a caminar y disfrutar de lo que tienes. 

-Pero si voy muy lento no aprovecho las oportunidades.

-Solo te pido que vallas con más calma.

La mujer se fue y el hombre se quedó pensativo sobre su estilo de vida. Ella tenía razón, aunque a veces se vuelva corta la vida es suficientemente larga como para relajar el ritmo. Desde entonces el iba con un poco más de calma. Su mujer y su hermano se dieron de cuenta, y se sintieron felices porque hubiera bajado la velocidad.

Un día el iba a buscar un nuevo trabajo, y fue al lugar donde vas cuando buscas trabajo (no se el nombre). Entró y habló con la chica que estaba en el mostrador.

-¡Hola!-dijo la chica- Buscas trabajo, ¿no?

-Exactamente.

-Bien. Tengo aquí unos fallos con el ordenador. Espera en esa silla cinco minutos.

El señor se sentó. Le parecía extraño que estuvieran ellos solos en ese lugar, sin nadie más esperando. Él esperó y esperó. Lo que fueron 5 minutos se convirtió en una hora, y esa hora en un día, y ese día en un mes, y ese mes en un año... Su mujer murió, su hermano estaba en coma en un hospital, todos sus amigos tendrían como 70 años o estarían muerto. Pasó toda su vida esperando por aquel trabajo en aquel lugar. Pero para el solo habían pasado cinco minutos. Decidió ir a preguntar a la chica que pasaba, a lo que ella contestó:

-Está bien ir andando, pero tampoco hace falta quedarse quieto.

En ese momento toda la habitación se puso negra. El señor estaba con miedo.

-¿¡Quién eres!?-preguntó con miedo.

-Soy yo.-contestó ella.

En ese momento ella se convirtió en lo que el ya suponía.

En el hombre de familia de mujer y hermano.

El hombre que siempre iba rápido."

Puede que a lo mejor me haya pasado esos cinco minutos, o puede que me haya dejado un poco (no os fieis por lo que pone, yo cronometré desde no se donde y me daba más de dos minutos). Lo importante es que halláis entendido la moraleja, ¿no? Porque la entendisteis, ¿verdad? La moraleja es que aproveches tus cinco minutos andando.

Sal de tus miedos y ve a vivir tu vida.