En un lugar muy lejano.

Epilogo

Epilogo.

-----------------Por favor necesito que lean lo último---------------

Actualidad.

-Amelia apresúrate que llegaremos tarde al cumpleaños de Facundo-le grito.

-Solo le tengo que dar de comer a los perros-me dice desde el otro lado del departamento.

-Te espero abajo-digo y salgo por la puerta hacia la entrada del edificio.

-Espérame, espérame. No te dejaré sola ni por un segundo con ese vientre-me dice Raimundo tomándome la mano.

-Ya estoy lista-dice Amelia corriendo hacia dónde estamos Raimundo y yo.

Bajamos las escaleras para llegar al primer piso. Antes esto se me hacía corto pero ahora que tengo cinco meses de embarazo…es eterno.

Raimundo me ayuda a bajar las escaleras mientras que Amelia llega las manos cargadas de regalos para Facundo, el hijo de Mia y Federico.

Llegamos abajo y Peter ya nos esperaba con Ann, su novia desde hace tres meses. Ella es muy alta rubia, tez dorada y ojos azules casi blancos. Es muy hermosa además de ser simpática.

Todos, Peter, Raimundo y Ann, me ayudan a subir al auto. Cuando lo logramos todos estamos agotados incluyendo a Amelia, aunque ella solo está agotada de reír.

Raimundo se sienta a mi lado y Amelia al otro.

-Creo que nuestro bebé será muy grande-me dice al oído.

-Es culpa del padre-digo  ya que él es muy grande.

-O quizás a la madre le gusta mucho comer-dice y me da un tierno beso en los labios

En poco tiempo llegamos al departamento de Mia y Federico en la puerta habían unos globos colgados de distintos colores.

Raimundo toca la puerta unas veces hasta que Mia con las manos llenas de crema abre y nos recibe.

-Tengo que ir a buscar a alguien, vuelvo enseguida-digo antes de entrar.

-¿Quieres que te acompañe?-pregunta Raimundo.

-No puedo ir sola, no me demoro-salgo y me dirijo unos pisos más abajo.

Toco la puerta pero nadie me abre. Decido tocarla de nuevo, pero nada.

-¿Pía? ¿Estás en casa?-pregunto.

-¿Belén?-dicen por el otro lado de la puerta. Inmediatamente reconozco la dulce, aguda e inocente voz de Pía.

-Sí, soy yo. Te quiero mostrar algo, abre la puerta-lentamente la puerta se abre y por un costado aparece la cara de Pía.

-¿Qué te pasó?-dice abriendo los ojos de par en par al ver mi vientre.

-Engordé-mentí-¿Te acuerdas que hace mucho pero mucho tiempo te dije que algún día conocerías a Amelia?-Pía asintió con la cabeza-Pues ese momento ha llegado, ven conmigo.

La tomo de la mano y las dos subimos hasta la casa de Mia y Federico. Toco la puerta un par de veces y Amelia me abre. Inmediatamente Pía se esconde detrás de mis piernas.

-Pía ella es Amelia-me corro para que ambas se puedan ver.

Amelia es igual o incluso más tímida que Pía pero por alguna extraña razón, ambas hicieron clic de inmediato, transformándose en buenas amigas.

Hoy es el cumpleaños número tres de Facundo y los mismos de siempre están invitados. Facundo es un niño hermoso, perlo castaño con ondas y largo como el de Mia, ojos grandes y verdes oscuros como los de Federico y las pestañas largas de ambos.