Punish me, teacher. - Larry OS

Punish me, teacher🌌

El sonido del timbre llena el aula y todos salen lo más rápido que pueden hacia el receso.

Yo, como siempre, me quedo el último en salir del aula. Tan sólo para deleitarme viendo como el profesor de biología recoge sus cuadernos.

Dándome la espalda y curvándose levemente hacia el escritorio, mostrándome su trasero bien contorneado y voluptuoso, que convina perfectamente con su musculado torso. Casi pareciendo que lo hace tan sólo para calentarme, como cada vez que acaba sus clases y tengo que ir a masturbarme al baño.

Me dirijo a la salida antes de que la seductora voz de Louis o, como todos le llaman, profesor Tomlison, me detenga.

-Styles, me gustaría hablar contigo después de las clases. No vas del todo bien en mi materia y tu último examen es... Merecedor de un castigo- dijo dejando notar su acento y haciendo una pequeña pausa en sus palabras finales.

-¿Qué? No, por favor señor Tomlinson, no me puede castigar-suplico ante la idea de que mi madre se entere de mis últimas calificaciones.

-Mis castigos son algo diferentes Hazz.-espera, ¿cómo me ha llamado?

Un rubor alcanza mis mejillas rápidamente. Se acerca peligrosamente traspasando la distancia que deberíamos estar guardando para agarrar mi cintura y depositar un suave beso en mis labios.

-Has sido un niño malo, ¿acaso crees que no he visto como me observas al final de las clases?

¿De verdad esto está pasando?

Me encuentro completamente en shock sintiendo como Louis baja sus manos hacia mi trasero poco abultado, acomodando sus manos en él para comenzar a manosearlo. De inmediato siento como el lívido me sube por las nubes. ¡Oh Dios! Mi fantasía se está cumpliendo. Vuelve a besarme, pero esta vez es un beso mucho más pasional y húmedo.

Su lengua se cuela en mi boca sin permiso, explorando cada rincón de ella. Mis manos acarician su pecho saboreando esta utopía. Me acaricia lentamente dejando una suave nalgada en él. Él gime en mi boca haciéndome repetir su acto pero con menos intensidad. Se separa lentamente con la mirada fija en mis labios.

-No creo que este sea un buen lugar para besarme con mi alumno. Ven hoy al final de tus clases a mi departamento - se acerca al escritorio para coger su maletín y va hacia la puerta pasando por mi lado-. Recibirás tu castigo niño malo.-susurra en mi oído antes de salir contoneando sus caderas y poniéndome más caliente de lo que estaba.

Las clases se me hacen demasiado largas, espero con impaciencia que llegue la hora de visitar a mi profesor favorito. Muerdo mis uñas con nerviosismo cuando me encuentro en el departamento. Llamo suavemente en la puerta de madera recibiendo una invitación a entrar adornada con un bello acento. Me encuentro al señor Tomlinson sentado en su gran sillón de cuero con un libro entre sus manos. Los dos primeros botones de su camisa están abiertos y su corbata desordenada.

-Cierra la puerta con seguro, pequeño. Tenemos algunos temas importantes que tratar y no me gustaría que nos interrupieran.

-C-claro- tartamudeo obedeciéndole.

Da la vuelta a su robusto escritorio sentándose sobre él y mirando hacia mí, que aún me encuentro en la puerta. Llama mi atención palmeando su muslo.

-¿Por qué no vienes hasta aquí y me demuestras cuánto sabes sobre el cuerpo humano? Ese es uno de los estándares que has de cumplir.-insinúa poniendo una mirada.

Me acerco con determinación en busca de su calor. Ataco sus labios ferozmente succionando el inferior para después morderlo de manera débil. Continúo con el beso que se ha tornado aún más caliente. Se crea una batalla de lenguas en busca de entrar en la boca contraria y tomar el control. Mis manos bajan hasta su erección acariciándola. Él suelta un jadeo acercándose todavía más a mí, provocando un revoloteo en mi estómago. Nuestros labios se mueven acompasados transmitiendo un deseo inmensurable. Alcanza el dobladillo de mi camiseta subiéndola lentamente. Pasea su mirada por mi torso desnudo, apenas tengo un músculo mascado, pero su mirada de satisfacción me hace sentirme realmente bien. Arranco su camisa saltando algunos botones que quedarán perdidos sobre el oscuro parqué. Dejo un besos por su pecho, él se baja de la mesa cambiando los roles.