Mi Extraño Compañero

¿Qué pása?

En mi casa...

Llegué a mi casa y miré a mi mamá en la cocina, con su cabello rizado color castaño rubio recogido con un broche, su piel clara, ojos color verde claro, traía un mandil rojo pantalón de mezclilla y tenis, me acerqué a ella, la abrase y me dijo.

-¿Como te fue hija?-

Me agache no sabia que decir, mi corazón latía muy fuerte como una batería en medio concierto, mi mente estaba en blanco me sentía como si me estuvieran interrogando después de haber hecho algo malo no se porque me sentía así, traté de tranquilizarme, me senté en el comedor y le respondí.

-B...bien-

-¿Segura?...te ves nerviosa-

-...si todo esta bien...no te preocupes-

Quería contarle lo que me pasó pero algo no se porque me hacia detenerme en decirle.

Mi mamá me dio de comer pollo con ensalada y agua fresca, me encanta su comida, comí muy delicioso.

Terminé, me levanté del comedor, tomé mi plato y mi vaso, los lavé, subí las escaleras y me metí a mi cuarto, aventé mi mochila en mi cama, me acosté boca arriba, suspire, cerré mis ojos y me puse a pensar sobre lo que me pasó en todo el día.

Cada vez que me acordaba de lo que pasó, me daba escalofríos, apretaba mis manos lo mas que podía y tragaba saliva.

Pero bueno después de pensar y pensar en eso decidí olvidarme de eso y saqué mis libros y libretas de la mochila los abrí y me puse a estudiar. Después de un tiempo, escuché que alguien grito mi nombre, me levanté, abrí la puerta y pregunté.

-¿Alguien me llamó?-

...

Nadie me contesto, no le tome importancia, creí que solo había escuchado mal, me fui a mi cama, me volví a acostar y seguí estudiando.

Pero al poco tiempo volví a escuchar que alguien me llamó por mi nombre, solté el lápiz, me levanté de la cama, caminé hacia mi puerta, la abrí y volví a preguntar.

-¿Alguien me llamó?-

...

Y seguía sin contestarme nadie, estaba confundida, pues había escuchado mi nombre claramente, me quedé unos segundos esperando que alguien me contestara, pero no, nadie me contestó, cerré la puerta caminé hacia mi cama, me acosté y seguí con mi tarea.

Al poco tiempo vuelven a llamarme, pensé que solo estaban tratando de asustarme mis hermanos, ya enojada me levanté, tiré el lápiz encima del libro, me acerqué a la puerta, la abrí y dije...

-¿Quién me llamó?-

...

Nadie me contesto, estaba tan enojada que bajé las escaleras corriendo, me asomé a la cocina pero no había nadie, me asomé a la sala y estaba la televisión apagada, la computadora apagada y no había nadie, solo una nota en la mesa de centro que decía...

"Hija salimos todos al parque nos fuimos a las 6 pm. regresamos a las 8 pm. te dejamos comida en la alacena"

Estaba un poco confundida, son las 7 pm. hacia una hora que se habían ido, hace 10 min. que me había pasado esto como me pudieron hablar si no había nadie.

Estaba asustada, sudando frío y con escalofríos que recorrían todo mi cuerpo, estaba temblando casi como una gelatina, trague saliva y me fui lentamente a mi cuarto, subía las escaleras, cada vez que subía un escalón rechinaba, era raro porque nunca habían hecho algún ruido al caminar sobre ellas, no le tomé tanta importancia y subí a mi cuarto.

Llegué y noté que mi puerta estaba totalmente abierta, como podría ser posible que estuviera totalmente abierta si cuando bajé corriendo la cerré.

No sabia que pasaba estaba completamente asustada y confundida, al entrar al cuarto sentí un olor a perfume de hombre, era un olor delicioso, limpio y juvenil.

Creí que era un ratero que intentaba asustarme, me acerqué lentamente a mi cama, tomé mi mochila, abrí con el menor ruido posible la cremallera, tomé un cutter y busqué por todo mi cuarto, pero no encontré persona alguna, bajé, busqué en la cocina, en la sala, en el baño etc. pero no encontré a nadie, pensé que se había ido.

Pero pensé porque si es un ratero no se robó nada...
Me quedé pensando y pensando si no era un ratero quien seria.

Subí a mi cuarto y me metí al baño, me miré al espejo sacudí mi cabeza y suspiré.

No entendía lo que pasaba, era muy raro y extraño, todo esto que me pasaba últimamente me preguntaba porque me pasaban estas cosas. 
Después de estarme cuestionando todas esas preguntas, volví a sacudir mi cabeza y me mojé la cara.

Salí del baño y noté que las cortinas y ventanas estaban cerradas, la puerta cerrada, mi cuarto estaba totalmente oscuro, apenas podía ver la sombra de la cama, de repente se mueve algo arriba de ella, era una silueta de humano, al parecer era de hombre.

Estaba asustada e indefensa, el cutter lo había dejado en el baño, no me podía mover estaba totalmente paralizada, mi respiración se aceleraba cada vez mas y mas, él se acercaba a mí, cada paso que daba él era eterno, era como si los minutos fueran horas, estaba nerviosa y sin saber que decir ni hacer, cuando por fin llegó, quedo como a unos treinta centímetros de cerca era muy alto como de un metro noventa, se agacho hacia mi, se agacho tan cerca que casi chocaban nuestras narices, podía sentir su respiración, levantó su mano derecha y la puso en mi hombro izquierdo, sentí su mano un poco cálida, podía oler otra vez ese delicioso aroma a perfume, no podía hablar, no le podía distinguir su rostro, todo estaba silencio, él tomo aire, al momento yo tomé aire y lo contuve, apreté mis manos todo lo que pude, cerré mis ojos y dijo...

-¡Hola Alejandra!- 

...